Se sientan y ríen cómplices. Aunque ya hace tiempo que las revistas hablan de ellos y su relación, es la primera vez que Gastón Pauls y Valentina Barrios ofrecen juntos una entrevista.
"¿Podés cambiar lo que sos?", pregunta el afiche de El sereno, la película de Óscar Estévez y Joquín Mauad en la que participan. Y de eso hablamos. De los cambios, de salir adelante, de reinventarse cuando te dan una oportunidad.
Gastón Pauls sabe muy bien que como le pasa a Fernando -su personaje- la vida puede tener muros difíciles de derribar. El director de la película lo conoció por el trabajo de su fundación Casa de la Cultura de la Calle, la que considera una verdadera puerta de escape a la condena social.
"Vivo en un país donde se debate si a los chicos hay que meterlos más temprano en la cárcel. En lugar de armar más cárceles para niños de 14 años, armaría más salas de teatro, más salas de expresión. Invertiría el dinero en no darles la espalda sino un abrazo. Fito dice: ‘No vine a divertir a tu familia mientras el mundo se cae a pedazos' y yo quiero entretener pero también sanar con el arte", reflexiona.
Y como el arte sana, El sereno también fue un ejercicio catártico para descubrirse. Gastón es Fernando. Fernando es Gastón. Valentina aprende de Ana y se anima a crecer. Todos ganan.
Montevideo Portal | Lorena Zeballos
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