Silvana Marrero y Carlos Darakjian presentan su espectáculo Ida y vuelta, con canciones del disco publicado el año pasado a través del sello Tararira Music, y lanzado en una gira que incluyó siete ciudades de España y un show en el Festival de Jazz de Bolivia.
El espectáculo se basa en un recorrido por el origen y la evolución del folklore latinoamericano, atravesado por influencias europeas y antillanas.
El 26 de abril, desde las 21:00, Marrero y Darakjian actuarán, junto a un seleccionado de músicos locales, en la Sala Zavala Muniz del Teatro Solís (Localidades a la venta en Tickantel y boleterías del teatro).
Antes de su presentación, Silvana Marrero respondió nuestra Metralleta, en la que contó sobre sus gustos musicales y reflexionó sobre el presente de la música popular.
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¿Recordás cuál fue el primer disco que te compraste?
Mujeres, de Silvio Rodríguez.
¿Y el último?
Avenido de Aca Seca Trío.
¿Cuál fue la primera canción que aprendiste a cantar?
"Ata una cinta Amarilla al viejo Roble" de Buddy Richard. ¡Jaja! Tenía tres años y la cantaba por fonética. ¡Jajajaja!. ¡Culpa de mi tía que la escuchaba todo el tiempo!
¿Cuál fue la primera canción (o disco) que te conmovió?
El disco The Game de Queen. Tenía 11 años ... fuimos con mis viejos al Palacio de la Música y me lo regalaron. Estuve escuchándolo 5 días seguidos. Cuando tenía un ratito me encerraba en el cuarto pegada al tocadiscos y el corazón se me salía del pecho.
¿Qué tiene que tener una canción para que vos la interpretes?
Un texto que me llegue al corazón y a la cabeza, una idea que me resulte interesante, una melodía seductora, inteligente. Tiene que sacudirme. Hay canciones que me van a acompañar toda la vida.
¿Qué cinco artistas considerás tus principales influencias?
Joni Mitchell, Chabuca Granda, Elis Regina, Roberto Goyeneche y Alfredo Zitarrosa.
¿Se puede explicar en dos o tres líneas qué es Ida y vuelta?
Es un viaje desde Europa al Rio de la Plata, pasando por las Antillas de la mano de los ritmos "de ida y vuelta", que a fines del siglo XIX y principios del XX influyeron en el folclore de allá y de acá, transformándose y adaptándose a cada región.
De todos los géneros que abordás en Ida y vuelta, ¿En cuál te sentís más cómoda?
Seguramente la milonga, y el tango, los demás no los había interpretado antes, fue todo un aprendizaje.
¿Qué elementos del folklore que abordan en Ida y vuelta reconocés en la música popular contemporánea?
Si hablamos de música popular de consumo masivo, poco y nada. En la música popular contemporánea regional, y en la uruguaya en particular: la milonga, la habanera, el tango, el vals, están presentes muchas veces.
¿Y qué creés que se perdió?
Es muy difícil escuchar farrucas, chotis o estilos, también llamados tristes. Los demás conviven y perviven en la música folclórica y popular contemporánea tanto rural como ciudadana.
Si Ida y vuelta fuera un libro o una película (o las dos cosas), ¿Cuál(es) sería(n)?
Libro todavía no ...Y película tampoco. Obra de teatro si, de autor nacional. Ya está en proceso y ojalá se concrete prontito.
¿Qué libro(s) estás leyendo ahora?
Mujeres que corren con los lobos, de Clarissa Pinkola Estés y Terribles ojos verdes, de Mario Delgado Aparaín.
¿Cuál fue la última película que te conmovió?
Siempre Alice, de Richard Glatzer y Wash West.
¿Qué artista nuevo descubriste últimamente como una revelación?
Uff, hay varios. En los últimos años he conocido artistas maravillosos: músicos, artistas plásticos, fotógrafos, escritores haciendo cosas increíbles por todo el mundo. No puedo nombrar uno. Perdón.
¿Para qué sirven las canciones?
La lista puede ser interminable. No imagino una vida sin canciones. Intento resumir: me completan. Eduardo Galeano decía que alguna vez se planteó ser cantante porque "en las canciones las palabras se movían ". Me encanta esa frase porque ilustra muy bien la magia de la canción.