Salta la Banca, la banda de rock argentina, se presentó este sábado en Montevideo, haciendo su debut internacional. Le tocaron al amor, a la gente, al sistema y a sus mecanismos de represión. Crónica de una noche que dejó en claro que no será la única ni la última vez.
Salta la Banca parece no ser un nombre de esos que se les exigía a las bandas para triunfar; no tiene detrás un aparato creador de hits y bandas momentáneas del momento. De hecho, este grupo, en su totalidad, es una banda de amigos e independiente que se formó allá en 2009, y que hoy tiene grandes proyectos y goza de buena salud.
Como ellos mismos manifestaron en diferentes entrevistas sobre su surgir, tomaron el ejemplo de grupo musical cooperativo de La Vela Puerca, y así con esa filosofía de entender el arte y el trato con el público llevan adelante su carrera.
Quizá hace varios años era muy difícil pensar que una bandita que se formara hace tan poco tiempo, estuviera ya tocando para público extranjero; habría que preguntarse qué sería de Salta la Banca de no ser por las redes sociales o que hubiera sido de SLB de haberse iniciado veinte años atrás, sin el avance de los medios de reproducción "independientes".
Lo cierto es que el recital estuvo plagado de emociones, momentos de mucha interacción con el público, bromas entre los integrantes del grupo, y hasta el mismo "frontman" se dio el lujo de poguear con su gente.
Es que el toque tuvo de todo y comenzó con la canción Somos, del primer disco oficial ‘Ya no somos dos ahora' y que retrata, valga la redundancia, lo que ellos son y lo que intentan hacer. "Somos el expreso a la locura, el boicot de la pavura, los verdugos del disfraz (...) al que no abre la cabeza no le crece el corazón".
El show transcurrió con temas de los tres discos editados por la banda hasta el momento: ‘Ya no somos dos ahora' (2009); C.O.P.L.A en 2012 (Canto Obligado Por Luciano Arruga) y un año más tarde lanzan Visceral. En estos temas hacen hincapié en la represión del Estado hacia las clases medias bajas de Argentina. Luciano Arruga es un joven secuestrado por la Policía bonaerense y desaparecido desde 2009.
El show se dividió en dos partes que no tuvieron baches de tiempo entre ellas. En la primera quedaron las canciones del primer disco, que bien se puede decir es el más cursi de la banda: "Ya no somos dos ahora, se fundieron nuestros fuegos en tu alcoba"; y algunos de C.O.P.L.A y Visceral.
El recital también tuvo momentos para que se subiera a tocar Insoluble, una banda de Argentina amiga de SLB, que después de debatir qué tema tocaban decidieron hacer uno de la banda "visitante"; luego, tuvieron otros minutos más mientras los bajistas se explicaban la canción.
La segunda mitad comenzó explícitamente cuando Santiago Aysine, vocalista, dijo: "ahora nos ponemos serios y contestatarios" e hicieron los temas más duros de los últimos dos discos.
Canciones como LaBuro, letra y acordes contra el amiguismo sindical o el relato enfrentando a los medios "burgueses" de comunicación lograron que la gente cantara como si la gente hiciera suyos los problemas de la banda.
El show terminó con Que salte la banca, una canción que, según ellos es la que resume su trabajo y todas las trabas que tuvieron por ser independientes e ir contra la industria cultural; en el estribillo Bluzz Live explotó coreando con el alma "No importa que duela, que el miedo intimide. Tu cese el sueño de unos cuantos giles".
Salta la Banca pasó por Uruguay y dejó una buena imagen que, sin decirlo, dejó la puerta abierta para seguir cruzando el charco aun con las limitaciones que tuvieron.
Montevideo Portal l Agustín Zabala