Arlett Fernández, la artista que desde niña estuvo vinculada al ambiente artístico y se posicionó en el circuito capitalino de espectáculos y peñas, transita la fase IV de la enfermedad de Parkinson. La pensión graciable que recibe como reconocimiento a más de 25 años ininterrumpidos de aporte a la cultura uruguaya, está en su etapa final, por lo tanto, su situación económica es de alta vulnerabilidad.
En este sentido, abrieron un Colectivo Abitab N.º 124236 en apoyo económico para la intérprete. La trayectoria de Arlett Fernández recorre desde 1996 con su actuación en el Teatro Solís junto a Yamandú Palacios, en “Tangos y Milongas en Concierto” a compartir escenario con artistas destacados como Laura Canoura, Estela Magnone, Fernando Cabrera, Eduardo Larbanois, Fabián Marquisio, Francis Andreu, entre otros.
Además, la intérprete fue galardonada con el Premio Revelación y Premio Mejor Voz de Tango en la edición 40 del Festival Nacional e Internacional de Folklore Cosquín en el año 2000.
En el año 2002 le diagnosticaron un Parkinson severo, enfermedad que poco a poco la apartó de los escenarios. Se despidió del canto una noche donde múltiples artistas le rindieron honor ante una Sala Zitarrosa que la vio retirarse cantando Gracias a la vida a capella y sin micrófono, según la disquera Bizarro.
“Una de las voces más maravillosas de nuestra tierra necesita de nuestra ayuda”, escribió el músico Fabián Marquisio en su cuenta de Twitter junto al comunicado que tiene como fin apoyar a Fernández.
Para brindar ayuda a la intérprete se abrió el Colectivo Abitab. De esta manera, las personas podrán donar dinero para que su situación mejore.
“Es en estos momentos que el aplauso debe transformarse en apoyo”, escribió la artista Laura Canora en su cuenta de Twitter.
El último disco que Fernández grabó fue Amalia, en el año 2019, en honor a la uruguaya Amalia de la Vega. La iniciativa fue de Ramón, el padre de Fabían Marquisio, quien le comentó a Arlett lo "hermoso" que sería escuchar en su voz las canciones de Amalia.