Grace Jordan y Michael Summa, una pareja de Florida (Estados Unidos), quiso que su casamiento tuviera a un invitado muy especial.
Junto a los padrinos del novio se sentó Cash, el golden retrevier de la pareja.
Antes del enlace, el can se preparó con dos entrenadoras para saber qué hacen el gran día: básicamente, caminar hacia el altar. Aunque lo consiguió, antes decidió hacer un par de paradas para saludar a los invitados.
¡Una ternura!