Cuando tenía 15 años, en 2012, su madre escuchó por la radio que en el departamento de Florida iniciarían una orquesta sinfónica juvenil. Volvió a su casa del colegio y le dijo: “Tenés que anotarte”, cuenta a Montevideo Portal el músico de 26 años Luis Barbé.

“No tenía ni idea lo que era una orquesta sinfónica. Pensaba que era para viejos”, rememora. Quiso anotarse para tocar la trompeta o el violín, porque eran los instrumentos que conocía, pero no había más cupos. Pero había un corno y le dijeron: “Tenés cara de cornista”.

Ese fue su primer contacto con la música. ¿Cómo logró domar un instrumentó y terminó en la formación de la Orquesta Radio Sinfónica de Viena? En uruguayo responde: “Siempre fui muy determinado en las cosas que hacía”. Y agrega que se sintió muy motivado por sus primeros profesores: “Me decían que tenía talento y facilidad, capacidad para seguir trabajando”.

Su próximo paso fue Montevideo, en la Orquesta Juvenil del Sodre y luego también en la Orquesta Sinfónica. Había comenzado a estudiar Derecho y surgió la oportunidad de irse a Buenos Aires: “Tenía la opción de seguir abogacía o ir a Argentina para tocar en la Orquesta Académica del Teatro Colón”.

Siguió el camino de la música y lo ficharon desde Berlín, donde le otorgaron una beca para estudiar en la Academia Filarmónica de la capital alemana. Viajó a Europa para “probar suerte” y “ver cómo era el mundo de las audiciones”. Estudió y hace un año, en Alemania, finalizó su licenciatura de Música con especialización en Corno. Y llegó a Viena porque ganó un concurso para entrar en la orquesta donde trabaja actualmente.

En marzo, cuenta, comenzó a organizar conciertos, uno en el Teatro Colón, donde se presentará el 8 de agosto, y el otro en su Florida natal, donde Barbé estuvo el pasado lunes acompañado de un pianista y un violinista, ambos argentinos. Los dos conciertos fueron organizados con el fin de recaudar fondos para una beca que Barbé otorgará a músicos que presenten una carta de motivación, algo que en un futuro anunciará conjunto a autoridades de Florida.

“Creo que es un comienzo, uno empieza con poco”, comenta sobre lo que llama “beca simbólica”. Y espera en un futuro poder ofrecer becas de mayores fondos. La motivación de Barbé es clara: “Tocar para mi gente, tocar para quienes me apoyan a la distancia”.

El músico fue invitado por la Sinfónica del Sodre, con el conocimiento de que pasaría por Uruguay, y tocará el sábado 22 de julio en el auditorio Nelly Goitiño.