En setiembre de 2017, tras la salida de Julio Bocca como director del Ballet Nacional del Sodre, un nombre quedó como candidato para tomar la posta: Igor Yebra.
Quien fuese bailarín estrella del Ballet de la Ópera de Burdeos entre 2006 y 2016 tomó con entusiasmo la dirección del Ballet Nacional en enero de 2018.
Tras casi tres años al frente la de compañía, Yebra anunció en una entrevista con la revista Galería que fue cesado del cargo y en diciembre volverá a España.
"Yo vine aquí porque había una idea y una apuesta por lo que yo amo, por eso me sumé, y porque era un desafío para mí. Pero esta no es la salida pensada ni de lejos. Es la primera vez en mis treinta y largos años de carrera que me dicen: "No vas a continuar, gracias, has hecho un trabajo magnífico". No me cuadra. Ese tipo de cosas hieren, porque me tienes que decir algo que me convenza. El sentimiento es agridulce, y en un principio más agrio que dulce", lamentó el coreógrafo.
A pesar de la tristeza, prefiere llevarse los buenos recuerdos: "La gente, el público, no tiene por qué llevarse una amargura mía, para nada, se va a llevar todo el cariño que me han dado a mí, que me han dado muchísimo. Hay que saber dividir las cosas".