Guepardo huérfano es el mejor amigo del hombre

Sylvester tiene cuatro años de edad, y unas mandíbulas capaces de quitar la vida a un humano adulto en cuestión de segundos. Sin embargo, ha sido criado por un "padrastro" humano, y su comportamiento no difiere del de un gato doméstico.

Ed Oelofse, de 31 años de edad, trabaja como cuidador en el santuario de vida silvestre Wild Horizons, en Zimabue, donde coordina safaris fotográficos. Él y su equipo son los responsables de que el felino esté hoy con vida.

En declaraciones citadas por Daily Mail, Ed cuenta que el guepardo quedó abandonado a su suerte cuando era un cachorrito indefenso, luego de que una leona matara a su madre y sus cuatro hermanitos

Ed, que es cuidador profesional de animales, ha trabajado en proyectos de interacción humana con leones, lobos y también con guepardos.

El gran felino y su salvador se han vuelto amigos inseparables, y al docilidad de Sylvetser es tan grande que se ha convertido en una especie de anfitrión para los niños que visitan el parque.

"Todos los viernes salimos con nuestro bus y recogemos a unos veinte niños de las escuelas rurales de la zona. Algunos de ellos jamás vieron un guepardo, o un elefante", cuenta.

Durante el paseo, logran interactuar físicamente con esos animales generalmente logran entender que "no son plagas, ni necesariamente peligrosos, ni incompatibles con la vida normal", recibiendo además información acerca de cómo proteger su hábitat.