El garrochista francés Anthony Ammirati fue protagonista el pasado fin de semana en los Juegos Olímpicos de París 2024. Su momento de fama no se debió a la obtención de una victoria, sino al obstáculo que impidió su triunfo: su propio pene.

Tal como informáramos, el deportista buscaba el pasaje a la final luego de haber superado una altura de 5,40 y 5,60 metros, y tenía que vencer la barra transversal colocada a 5;70. Sin embargo, su anatomía le jugó una mala pasada.

En uno de sus intentos, sus genitales chocaron con el listón y lo derribaron, acabando con su sueño olímpico.

Ahora, luego de la viralización del hecho y las incontables bromas que circularon en las redes, el malogrado salto de Ammirati podría acarrearle un rédito económico.

Según consignara TMZ Sports, desde la industria del porno le cursaron una jugosa oferta. El sitio para adultos XXX CamSoda estaría dispuesto a pagarle 250.000 dólares por una transmisión de una hora.

“Si fuera por mí, te premiaría por lo que todos los demás vieron, tu talento debajo del cinturón”, bromeó Daryn Parker, vicepresidente del sitio pornográfico, en una carta recogida por el citado medio.

“Como amante de las actividades centradas en la entrepierna, me encantaría ofrecerle hasta 250.000 dólares a cambio de un espectáculo de 60 minutos con cámara web, en el que muestre sus partes íntimas, menos el travesaño, por supuesto”, añadió el empresario.

Parker explicó que Ammirati no tendrá que preocuparse de que sus pantalones cortos de compresión no hagan su trabajo, tal como sucedió en su salto, ya que puede “dejarlos colgando todo lo que quiera”.

Hasta el momento, el deportista no ha hecho ninguna mención pública a la insólita oferta.