Es fácil identificar a Lee Ranaldo como una suerte de George Harrison del rock "independiente", escondido a media sombra en la formación de Sonic Youth, un paso detrás del  fructífero matrimonio entre el guitarrista Thurston Moore y la bajista Kim Gordon. La comparación, un tanto perezosa, sirve para resaltar algunas de las características de Ranaldo: un gran guitarrista, un vocalista competente que sin embargo dejaba escuchar pocas veces su voz en solitario, un compositor talentoso que se contentaba con aportar un par de temas por cada disco de Sonic Youth y el autor de un gran álbum solista post-ruptura del grupo.

Su anterior trabajo en solitario, sostenido con constancia paralelamente a la carrera de Sonic Youth, tampoco aportaba demasiadas pistas sobre las canciones escondidas en la cabeza de Ranaldo: más que nada, música experimental, poesía, improvisaciones o instalaciones artísticas. Todo cambió un par de años atrás, cuando Kim Gordon y Thurston Moore decidieron divorciarse, terminar el matrimonio más idílico del rock alternativo y de paso liquidar una historia musical de 30 años que marcó parte de la historia reciente de la música.

Con la disolución de Sonic Youth -Uruguay tuvo la suerte de ver uno de sus últimos shows en la gira sudamericana del 2011- la música de Lee Ranaldo salió a la luz con Between the Times and Tides, una colección de diez canciones que no reniega del legado Sonic Youth pero abreva también en fuentes anteriores.

En 30 años de Sonic Youth, Ranaldo ya le hizo a su guitarra todo lo que podía hacerle: golpearla con objetos inusuales, arrancarle aullidos, aporrearla violentamente con la mano derecha y hacer del ruido una forma de expresión artística. Ahora, en la calma de la mediana edad, Ranaldo deja salir su lado más clásico y sosegado en un álbum de canciones accesibles, más allá de los inevitables arranques sonoros y la experimentación psicodélica de algunos pasajes.

Si en temas como "Xtina as I knew her" retoma la línea más clásica y reconocible de Sonic Youth, Ranaldo también se despacha con las canciones más accesibles de la historia de su banda (como "Lost" y "Off the plane") y resume la historia de la evolución del folk en temas como "Fire Island", que parece el resultado de un duelo entre Wilco y Neil Young.

Mucho de eso podremos ver el próximo lunes 15 de julio en La Trastienda Montevideo a partir de las 21 horas, cuando Lee Ranaldo se presente junto a su band The Dust para mostrar estas canciones y también las que integran un disco que ya tiene casi salido del horno. Días antes de su regreso a Uruguay, esta vez solo, hablamos con Ranaldo sobre los pros y contras de emprender un camino solitario y el legado de Sonic Youth.

Es tu primer álbum solista tras conocerse la separación de Sonic Youth, ¿significó algún cambio en el proceso de composición?

El álbum fue hecho en realidad antes de que saliera a la luz todo lo que estaba pasando con Sonic Youth. Ya estaba terminado cuando eso comenzó a conocerse, pero sí fue realizado en un período en el que Sonic Youth estaba un poco quieto, no estábamos haciendo mucha cosa, todos concentrados en proyectos diferentes. Empecé a acumular canciones y me pareció que había llegado el momento de finalmente hacer un disco solista como éste, con canciones cantadas por mí.

La composición en Sonic Youth era más bien un proceso colaborativo, sin importar quien trajera las canciones, ¿cómo fue el cambio ahora, contigo a cargo de todas las decisiones?

Fue lo opuesto a Sonic Youth, Yo escribí las canciones, lo produje, decidí cómo el disco iba a sonar, elegí los músicos (entre ellos, el baterista de Sonic Youth Steve Shelley, el guitarrista de Wilco Nels Cline, el ex colaborador de Sonic Youth Jim O Rourke y el tecladista John Medeski ). Fue algo parecido a ser el director de una película, con mis canciones y mi visión, lo que se sintió bastante bien en realidad. Estaba tan feliz con los temas que sabía qué hacer en cada etapa de la grabación.

Matador Records puso una etiqueta aclaratoria en la tapa del disco, que dice "El primer disco de rock de Lee Ranaldo", ¿Estás de acuerdo?

No estoy seguro de que sean las palabras exactas, pero queríamos dejar claro que este es un disco de canciones de rock y no un álbum noise experimental o algo así. En muchos sentidos, si bien yo he sacado varios discos, este es mi primer álbum solista (de "canciones"), de alguna forma.

¿Fue un esfuerzo deliberado por apartarte de tus anteriores trabajos más experimentales o del sonido de Sonic Youth?

No sé si fue súper deliberado, pero sé que quería sonar distinto. Las canciones son diferentes, para empezar, y el disco tiene su propio sonido desde los temas. Es decir, mi estilo de tocar la guitarra es el mismo, algo en común con los álbumes de Sonic Youth, pero desde el comienzo no imaginé hacer algo que sonara a Sonic Youth. No fue deliberado, las canciones pedían algo distinto.

Hay además un retorno a algunas influencias más clásicas o viejas ¿Eso también surgió naturalmente?

Si estás sentado escribiendo canciones en una guitarra acústica, no se puede evitar evocar cierto tipo de cantautores clásicos, ya sean Leonard Cohen, Neil Young, Bob Dylan, Joni Mitchell, Bill Callahan, John Marshall, etcétera. La música de Sonic Youth fue escrita en forma colaborativa como una banda de rock, reunida en un estudio, pero si estás solo en tu living haciendo temas con tu guitarra acústica sin dudas tendrá un toque de cantautor. Desde ese punto de vista definitivamente evoca aquellos primeros discos, como el debut de David Crosby o cualquier otro que se te ocurra. Constantemente estoy escuchando música vieja y nueva, y todo eso tiene su influencia. En este caso en particular, en lo que respecta a las canciones de Between the Times and Tides y del álbum que acabo de terminar, me concentraba más que nada en el sonido de la guitarra, tratando de hacer progresiones de acordes interesantes, probando diferentes formas de afinación. Es u proceso bastante natural, comienza por buscarle la vuelta a una afinación, probar cosas y de a poco las canciones comienzan a aflorar.

¿Cómo es el nuevo trabajo que sale en los próximos meses?

Se llama Last Night On Earth y es un disco más orientado a la banda que el anterior. Tiene un trabajo más instrumental y un montón de otra música. Saldrá en octubre, lo terminamos este mes. Es un grupo un poco más restringido esta vez, porque está hecho básicamente de los músicos que me acompañan en la gira. Es un disco un poco diferente, más eléctrico y suena más a banda porque trabajamos juntos como grupo las canciones por un buen tiempo. Tiene un toque casi psicodélico.

Planeta del sonido

El divorcio entre Kim Gordon y Thurston Moore acabó con el grupo que creó un paisaje sonoro único en el rock y permitió redefinir a finales de los '80 el sonido de la guitarra, convirtiéndose en puntales de un movimiento que la dictadura de las etiquetas definió imprecisamente como "indie" o alternativo, y que marcó el destino de la industria musical en los años '90.

Con el punk como raíz, con la experimentación guitarrística propia del freejazz, el énfasis en el uso del ruido como parte de la estructura musical (en la búsqueda de texturas nuevas), en las afinaciones alternativas y en un sadismo muy productivo con sus instrumentos, los Sonic Youth lograron combinar panoramas tan dispares como climas densos, melodías accesibles o catarsis sonoras.

Su capacidad para retorcer estructuras pop, subvertirlas con el ruido y esconderlas detrás de una máscara de sonido fue utilizada provechosamente por Nirvana, que tomó también la dinámica de los Pixies para crear el estilo más exitoso y explosivo de los años '90.

En el 2011, ¿cuál fue tu reacción al enterarte de que la banda llegaba -aparentemente- a su fin? ¿Rabia, tristeza, alivio?

Más que nada sorpresa, porque no tenía pistas de que Kim y Thurston estuvieran pasando por momentos duros juntos, parecía que su relación era justamente lo opuesto a ello, así que me sorprendí. Me sentí feliz de que mi disco estuviera bien encaminado para cuando nos enteramos de que algo estaba sucediendo entre ellos. Ya estaba en proceso de terminarse, por lo que fue compuesto en un ambiente normal, no en una situación en la que yo me diera cuenta que las cosas estaban por cambiar para Sonic Youth, y eso fue bueno para el álbum.

Estuviste en el 2011 con Sonic Youth en Uruguay, cuando ya se sabía que la banda llegaba a su fin, ¿Cómo fueron esos últimos shows, con el final de la banda en la cabeza?

Aquellos shows fueron un poco raros, porque sabíamos que luego de ellos íbamos a parar, pero ya estaban fijados y teníamos que tocar. Sobre el escenario se sintió como siempre, una vez que las canciones comenzaban a sonar en vivo todo parecía normal, pero todo lo demás en torno a aquellos recitales estaba muy lejos de ser normal.

¿Y cómo se siente salir de gira ahora, sin la presencia de las personas que te acompañaron por 30 años?

Lo disfruto. Definitivamente es el momento perfecto para hacer esto, y lo básico es que disfruto de presentar las canciones cada noche más que nada, y a partir de eso el resto simplemente encaja en su lugar.

¿En qué momento te diste cuenta de que Sonic Youth estaba significando algo importante e influyente en la escena musical?

En algún momento entre finales de los '80 y principios de los '90, en la época en que salió Daydream Nation o Sister. Podías notar que mucha gente estaba prestando atención a lo que hacíamos y luego, quizá diez años después, te encontrabas a músicos de muy distintas edades que se acercaban y te decían que tal disco los había impresionado o cambiado su vida o sido particularmente importante. Es agradable escuchar eso de tus colegas, que tus discos hayan afectado tanto a gente que considerás tus pares.

Nirvana se llevó toda la popularidad, ¿te crea algún resentimiento eso?

Ningún resentimiento, Nirvana fue un fenómeno. Y el camino que siguieron nunca iba a ser el camino de Sonic Youth. Nuestra música era, honestamente, demasiado extraña para algo así, la música de Nirvana era muy accesible y fue grandioso verla desarrollarse desde los mismísimos comienzos, en cierta forma. Yo me siento bastante feliz de todo lo que le pasó a Sonic Youth en nuestra carrera y no tengo ningún remordimiento al respecto.

El show

LEE RANALDO & THE DUST
(Con Lee Ranaldo & Steve Shelley de Sonic Youth)
Lunes 15 de Julio, 21:00 horas.
La Trastienda Club Mvd

Entradas en venta en Red UTS, Tienda Inglesa, Red Pagos y Tickantel.
Financia OCA

Después de un año de su última gira, la banda está en plena proyección y cuenta con Steve Shelley, Alan Licht, y el nuevo bajista Tim Luntzel.