Enamorado de la luna montevideana y loco por su gente está Ariel "Pinocho" Sosa, quien cumple en 2010 sus 30 carnavales ininterrumpidos y los quiere festejar tirando la casa por la ventana. Dejando además todo por su conjunto para tratar de alzar la copa de campeón en su categoría por tercer año consecutivo.
Cumpliendo la función de director/componente, moda impulsada en los años 70` por Alejandro “Buby” Benítez en Los Klaper`s, "Pinocho" le puso a sus “gitanos” la elegancia de los dirigidos por José “Tucho” Orta, la frescura del joven Javier Sacco y sus Walker`s, la ostentosidad de Caras y Caretas, y hasta la fuerza que llevó siempre consigo y fue alimentada en Araca la Cana.
El amor y el odio, los lleva en su mochila pesada, llena de aficionados que hacen que en verano se viva la fiesta más popular de Uruguay.
Su presente, “las caminadas”, sus riñas, las anécdotas más jugosas y las cosas turbias que pasaron y siguen pasando en la “burla” de Dios Momo, son motivo de una charla muy jugosa, de la que no se arrepentirá nunca, porque él es así, controversial, auténtico y un loco de la guerra, un apasionado de las tablas, un enamorado del carnaval.
¿Cómo se viven y se preparan sus 30 carnavales?
Se viven con muchas ganas, mucha expectativa. Tengo la idea de empezar en la primera semana de agosto con un libro, que me lo va a editar Atilio Garrido, en donde voy a contar anécdotas sobre mi vida en los 30 carnavales. Y a la vez preparando el conjunto, concentrado para el espectáculo 2010 de Zíngaros como nunca lo hice antes, porque hace mucho tiempo que un conjunto de parodistas no gana tres años seguidos. Los últimos fueron Los Gaby`s que metieron cuatro entre 1973 y 1976. Desde esa época nadie más lo consiguió y vamos a hacer lo imposible para lograrlo. Por nosotros, por los componentes, nuestras familias y por sobre todo por esa maravillosa hinchada que tenemos de miles de personas que nos siguen constantemente.
¿Por qué cree que nadie más pudo conseguir ganar tres años seguidos?
En el tiempo de Los Gaby`s peleaban menos conjuntos. Estaban ellos, Los Klaper`s y alguno más. Con el pasar de los años fue creciendo la paridad. Aparecieron Los Walker`s, Los Adam`s ahí comenzó a cambiar.
Pero ya la gente lo ve como imposible, ¿no?
Es que creo que fueron casualidades. A nosotros nos pasó después de que ganamos en 2003 y 2004 con espectáculos maravillosos. En 2005 salimos segundos y la verdad pensaba que ganábamos. Vamos a ver que pasa en 2010 y después veremos. No creo que sea tan así, de que un conjunto no pueda ganar por tercera vez consecutiva.
Si bien sus roles fueron cambiando a medida que fue pasando el tiempo, ¿lo vive siempre con la misma pasión el carnaval?
Cuando era componente era la pasión más grande que tenía. Ahora también voy a ver a mi hijo jugar al fútbol (en la quinta de Racing) y me encanta. Antes era todo más fácil ya que como componente me preocupaba solo por preparar los personajes, ir a ensayar, maquillarme y a los tablados o a concursar. Siempre lo viví con mucha expectativa. Ahora como director es mucha más responsabilidad, tengo más carga encima, y últimamente vivo todo con mucha presión. Tengo un conjunto que tuvo siempre que superar muchas dificultades, lleva mucha gente y por eso nos exigen más que a los demás. Cada año la presión por sacar el conjunto crece más.
¿Ya tiene elegidas las parodias?
El espectáculo lo estamos armando con el libretista Leonardo Preziosi, con Marcos Lacaze, uno de los coreógrafos, y con Darío Spósito que crea la escenografía. La primera parodia ya la tenemos elegida y pensada. Yo ya la hice hace muchos años y por ella me quedó el apodo. Es Pinocho. En aquel entonces no fue una parodia tan profunda, aunque estéticamente fue espectacular. Teníamos un vestuario diseñado por una fenómena como lo fue la señora Guma Zorrilla, hermana de China y realizado por Maria Azaián. Era magnífico. Pero no tenía mucho contenido. Nosotros vamos a apostar a otra cosa. Me comentaba Leonardo que se cumplen 50 años de la declaración de los derechos del niño y vamos a agarrar esa temática, que es muy fuerte, para insertarla. Aparte va a estar escrita por Preziosi por lo que va a ser muy profunda y no el cuentito simple.
¿Y la segunda?
Estamos esperando un poco más para decirla. Hemos tirado fruta por todos lados. Dijimos de hacer la Agonía y el Éxtasis (Miguel Ángel), o la vida de Pablo Estramín, pero al final nos decidimos por otra.
Ah pero, ¿por qué eso de mantenerla en secreto? ¿Se gana algo?
No sé si ganamos algo. Es la primera vez que mantengo en secreto una parodia o un espectáculo. Lo que pasa es que últimamente todos los conjuntos se fijan en lo que hacemos nosotros. Antes criticaban nuestras presentaciones porque teníamos canciones de merengue, ahora todos bailan ese estilo. Hemos venido haciendo parodias relacionadas con el Río de la Plata, mejor dicho con Uruguay, como hicimos la Fuga de Punta Carretas, Roberto de las Carreras, Carlos Páez Vilaró. Entonces ahora todos apuntaron para ese lado y como vamos a tratar de hacer algo distinto, no queremos nos sigan.
Pero los demás conjuntos ya anunciaron casi todas sus parodias. ¿Piensa que las pueden llegar a cambiar en base a lo que usted diga?
Pienso que si. Zíngaros es referente y más ahora.
Salvando las distancias lógicas, ¿el carnaval cambió tanto como se dice?
El carnaval creció mucho gracias a la televisación. Le dio mucha mas importancia. Iba a buscar una publicidad y me decían “que lindo el espectáculo, muy popular, pero vení mañana”. Ahora tuve la suerte de que me llamaran agencias muy importantes para auspiciar al conjunto. Me llegó a apoyar hasta Coca Cola. En lo que más cambió a favor el parodismo fue en la dinámica. Y en contra, en la cantidad de tablados. Antes hacíamos en un día de semana entre seis o siete escenarios, ahora hacemos tres o cuatro. Los viernes y sábados si tenemos muchos. Después no es ni mejor ni peor. Cada carnaval en su respectivo tiempo.
Nombró el tema de la televisión. Ahora al ser reelecto Enrique Espert en DAECPU como presidente, se vienen muchos cambios y parece que no va a ser renovado el contrato con Tenfield. ¿Está al tanto de eso?
Tengo entendido de que a Tenfield se le terminó el contrato, y da la casualidad de que estoy en el medio. Soy por un lado director y estoy en DAECPU y por el otro soy empleado de Tenfield. Creo que fue ofrecido un canal para trasmitir el próximo carnaval. Están en tratativas. Pero a mi lo que me parece es que Tenfield nos aportó muchísimo. Antes los canales no nos daban ni $0.50, como decía mi querido amigo (José) “Tucho” Orta (Director de parodistas Los Gaby`s, fallecido el 1º de Mayo de 1992). Te daban dos monedas y pasaban lo que querían. Ahora mi amigo Francisco “Paco” Casal puso mucha plata y valoró el carnaval. Deseo que a DAECPU le vaya bien, pero me parece que no puede dejar de trasmitirse el concurso.
Usted vivió ya tres décadas de carnavales. Y se habló siempre y mucho sobre la “cosas raras” que rodeaban, en especial en los 80`, a algunos conjuntos. ¿Cuándo era joven se daba cuenta si alguien “caminaba” para sacar ventaja sobre otros?
Creo que no hay mafia ni tampoco la hubo. Es algo folclórico. De repente hay hinchadas más pesadas que otras. Nunca escuché que hayan lastimado a alguien en carnaval. Creo que todos los directores de carnaval alguna martingala, sin poner dinero, siempre hacen por sus conjuntos.
¿Hizo usted alguna “martingala” por Zíngaros?
Siempre fui el peor alumno del jurado y nunca “caminé”. Me peleé siempre con ellos, que es diferente. No creo que haya mafia en carnaval.
¿Y nunca presenció alguna “caminata” en los conjuntos donde era componente?
Si, y muchas de esas cosas van a estar en el libro. Hasta temas más fuertes.
¿Tan fuertes cómo cuando componentes de un conjunto muy conocido se acostaron con dos jurados para sacar ventajas?
¿Quién te dijo eso?
Una fuente muy cercana al conjunto.
(Risas) Eso lo voy a contar en el libro. Es una anécdota muy graciosa e increíble. No importa el año ni el conjunto.
¿Usted fue uno de los que se acostó con el jurado?
¡No! (Risas) Yo fui el que salió corriendo cuando los vio.
Eso dicen todos…
¿Qué salí corriendo?
No. Todos dicen que salieron corriendo. Nadie se hace cargo.
(Risas) Yo fui el último en llegar y me encontré con ese panorama. Al otro día en el ensayo la gracia era, “el loco salió corriendo”.
¿Y también salió corriendo con el cuaderno de apuntes de un jurado en 1996?
Corriendo no. Pasó algo si después de que yo recusé a un jurado. Una noche lo encontré en un bar en estado etílico y me mostró una libreta con todos los puntajes de ese carnaval, en su rubro. Entonces lo que me extrañó era que estaban escritos los puntajes de la primera ronda y los de la segunda cuando todavía no había ido ningún conjunto en la categoría de parodistas. Ahí le pregunté como podía pasar eso y me contestó que tenía que ser así. Me puse furioso y fui corriendo a hablar con el presidente del jurado (Néstor Pallares), después me mandaron a la Intendencia a firmar un acta por lo que había pasado y ese carnaval, estaba segundo (según los puntajes que pudo ver) y terminé cuarto.
No hubo violencia según usted en carnaval, pero también se dijo siempre que en las décadas de los 70` y 80` entre Los Gaby`s y Los Klaper`s existían cruces importantes. ¿No es así?
No, pero son cosas folclóricas.
A la rivalidad de Zíngaros y Nazarenos se la comparó con la de estos conjuntos también… ¿Entre ustedes hubo roces?
Algún manotazo que otro, nada más.
¿Un manotazo no es violencia? ¿Es folclórico?
No, pero no iba más de eso. Recuerdo en el año 1984 hubo una piñata gigante en el tablado del club Larre Borges. Habían miles de personas y estábamos haciendo el final de la parodia del Rey Arturo con Los Walker`s y abajo estaban esperando Los Gaby`s. Estaba tan lleno el escenario, era impresionante. Estaba muy concentrado mirando hacia delante. Cuando observé hacia mis costados, me di cuenta que me habían dejado solo. Estaban al costado del tablado peleándose Los Gaby`s contra Los Walker`s. Y fue más la bulla que lo que se pegaron. Entonces todo el mundo habló en carnaval sobre ese lío como algo muy salado, y no fue tan así. Golpe hubo uno solo. El que le proporcionó mi utilero a Miguel Villalba. Después fueron insultos y agarrones, nada más.
Miguel Villalba era su ídolo, si no me equivoco…
Si fue uno de mis ídolos. El primero fue mi tío Dionel Machín “El diablo”, gran libretista de murgas en los años 60` y 70`, y fue el que me llevó a carnaval. El otro fue Miguel, cuando yo era niño. Me moría cuando lo escuchaba cantar en los tablados. Hasta el día de hoy me pasa lo mismo.
No tanto como cuando lo escuchaba antes, ¿no?
(Risas) Ahora tenemos tremenda rivalidad. Pero no le saco valor en lo que hace. Cantando fue, es y será un fenómeno.
¿E insultado por usted?
Lo insulté si, en 1987. Yo iba a hacer el personaje del Mano Santa, de Alberto Olmedo, y me acuerdo como si fuera hoy que Miguel me dijo, “no lo hagas porque vi a Mario Fosatti (gran parodista fallecido en 1997) en Los Gaby`s hacerlo y es maravilloso. Así que no lo hagas”. Ahí me traumé y no lo quería ni ensayar. Después arranqué a actuar en los tablados sin limarlo bien y un día nos cruzamos con ellos en Las Duranas. Estaba Mario haciendo el Mano Santa y me gustó para interpretarlo con más efecto. Anduve volando y la gente lo disfrutó mucho. Cuando terminamos agarré a Miguel y le dije varias palabras fuertes porque me había subestimado. Pero no, nada más. Él me dio una mano increíble cuando funde Zíngaros, y yo se la devolví cuando creó Nazarenos.
Usted fue acusado en 2007 de haber agredido a unos periodistas. Hasta salió en un informativo ese hecho. ¿Sigue sin haber violencia en sus repuestas?
Yo en carnaval me peleé con todo el mundo y nunca me elegí las pintas. Nunca abusé con nadie. Siempre me agarré contra los poderosos. Con el jurado, los periodistas, con DAECPU, y me suspendieron un año, con la Intendencia, con todos esos he tenido algún problema.
Llegó hasta a enfermarse por carnaval, ¿no?
En 2006 me agarré pánico. Todos los días me venían ataques aunque estuviera medicado. Fue muy feo. Aparte quedamos afuera de la Liguilla y en el Teatro de Verano fue el fallo más festejado por un sector de la prensa. Me quedó eso a mi, que los periodistas estaban contentos. Y la verdad, me daba mucho dolor porque no sabían lo que estaba pasando. El pánico es una enfermedad tremenda y ellos se burlaron de mí. Entonces al año siguiente los llamé y les pedí que no me hicieran reportajes, y en la segunda ronda uno de ellos me miró de forma despectiva, sobrándome y le tiré con un jugo que estaba tomando. Salí en el informativo, en todos lados como un delincuente, un asesino.
Lo que usted hace, ¿cree que se agranda al doble en carnaval?
Claro, por supuesto. A mi hay gente que me ama y otra que me odia y mucho. Al despertar las dos pasiones opuestas, se agranda todo más para un lado o el otro.
¿Hay gente que literalmente lo odia?
Hay gente que me odia sin conocerme por la misma competencia del carnaval, aunque se que es mucho menor ese número. No es lo mismo que haga algo yo, de que lo haga “Edwin Estein”. En estos dos últimos años hubo directores que hicieron cosas increíbles y no pasó nada. Si yo hubiera hecho algo similar, se armaba tremendo lío.
Lo primero que se dice cuando alguien nombra a "Pinocho" Sosa, es: “Ah, el que se droga”.
Más que afirmarlo, creo que es la primera preguntan que hacen. ¿Pinocho se droga? Voy a cumplir 30 carnavales, estuve 15 años en la música tropical. Tengo mucha noche y nunca en mi vida me drogué. Ni se me pasó por la cabeza pensarlo. Lo saben en mi familia, mis amigos. Los cientos de compañeros que tuve en carnaval, que nunca tomé nada. Si estoy marcado por un numerito en Narcóticos, porque caí con mis compañeros de Karibe con K, por acusaciones que nos hicieron. Ese tema fue muy conocido, ya se sabe lo que pasó. No tomé nunca nada, ni tampoco fumé. Un día perdí de hacer una publicidad para el exterior de cigarrillos y quedé por la actuación, pero me sacaron porque no sabía ni fumar.
Si no se droga, entonces es loco…
Dicen siempre eso, es verdad. (Risas) Tengo terrible temperamento y muchísima ansiedad. Me sale tremenda fuerza cuando subo al escenario. Me excita mucho actuar en el teatro y eso me favorece.
Arriba le juega a favor, pero abajo, ¿no llegó a cometer ningún acto del cual se arrepintió enseguida?
Eso es por mi temperamento. Ahora estoy mucho más tranquilo que antes. Tuve tiempos en los que reaccionaba sin pensar. Cometí muchos errores. Hasta el gerente del Banco Comercial, el señor Luis Fuentes, me pidió que me tranquilizara cuando fui a arreglar la publicidad con él. (Risas)
¿Los que se van de Zíngaros, son traidores?
No, los que se van tiene las puertas abiertas.
Traidor, es un término que se utiliza mucho en carnaval…
Si, pero están los casos de Leonardo Pacella que volvió a sus queridos Choby`s, Álvaro “Conejo” Pintos, Walter “Cucuzú” Brilka, ellos como tantos otros se portaron de novela conmigo. Esta ese tipo de gente, como la otra. Personas a las que les brindé el conjunto de par en par y se fueron por intermedio de un mensaje de texto. Eso si me dolió mucho, pero no los llamo traidores ni nada. Yo cuando me iba de Los Gaby´s, lo primero que hacía era ir a hablar con el Tucho.
¿Alguna vez se hubiera ido para Los Klaper`s?
En aquella época era hincha de Los Gaby`s, pero me encantaba el estilo de Los Klaper`s. Nunca me hablaron para ir. No creo que hubiese ido.
¿Le encantaban los Nazarenos también?
¡No, para nada!
¿Por el estilo?
¡No, nunca me gustaron! Tal vez por la rivalidad que se creó en los últimos años. Pero soy sincero, no los puedo ni ver. No salen el año próximo y serán una gran pérdida. Pero me preocupa solo mi conjunto, y los cientos de personas que van a cada ensayo a vernos.
¿Cómo maneja esa popularidad tan grande? Debe ser difícil representar a tanta gente.
Cada vez nos tratamos mejor con la hinchada. Zingaros no representa a 30 personas. Vas a ensayos de otros parodistas y ves las sillas vacías. No somos 20 componentes, somos un grupo de miles de personas. Cuido mucho a la gente. En mi conjunto no pude nadie consumir drogas de ningún tipo. Van muchas familias a vernos. Mañana pasa algo y no quedo solo yo manchado, queda toda la hinchada.
¿Encontró a alguien consumiendo drogas en su conjunto?
Dos veces tuve que echar a componentes. No por consumir, pero estaban en cosas raras, en temas turbios.
¿Hoy existen temas turbios alrededor de Zíngaros?
Hoy estamos muy tranquilos dentro del conjunto. La salida de Cucuzú tuvo si cosas oscuras. Fui a hablar con él y me dijo que lo amenazaron para que no saliera de nuevo. Ahí lo fui a buscar y le dije de ir a hablar con la persona que estaba haciendo esa atrocidad. Pero él prefirió dejar todo así. Entonces sale en murga Momolandia.
Hoy dijo que no había mafia…
No lo considero así. Es un tipo aislado que se quiere hacer el vivo, nada más.
En el programa radial Carnaval del futuro, emitido por 1410 AM, comentó usted que desde lugares insólitos le estaban ofreciendo dinero a componentes de Zíngaros para que salgan en otros conjuntos. ¿Tomó cartas sobre el asunto?
Hay una persona que me esta haciendo esas cosas por una determinación que tomé faltando cinco días para arrancar el carnaval pasado. Desde ese día comenzaron a “tocar” con plata a Cucuzú para que se vaya y nos deje tirados. Viene todo de un lugar insólito. Puede ser desde un hospital, un circo, una carnicería, un calabozo de una cárcel, desde una iglesia, de donde se les quiera ocurrir. O fue el doctor, o fue el payaso, el carnicero, o fue el preso, o hasta el cura. Eso si, dios lo va a castigar. Yo solo me voy a preocupar porque Zíngaros sea el mejor conjunto, lo otro no me importa. Llegué hasta donde estoy metiendo y metiendo. Siempre digo, no soy ni buen cantante, ni bailarín, ni actor.
¿Y egocéntrico?
Si, tengo tremendo ego. En los conjuntos que salí siempre quise hacer los papeles protagónicos de las parodias. Tuve siempre banca, hombros muy grandes y fuertes para aguantar el Teatro lleno. En Zíngaros es distinto. A veces salgo a jugar a adelante y otras veces traigo gente para que cumpla ese rol.
En las murgas las figuras se están renovando gracias a la llegada de las murgas jóvenes. ¿Por qué cree que en parodistas siempre están los mismos en el tapete?
Yo siempre escucho que dicen, “aquel es una gran figura, el otro es un fenómeno”. Figuras somos los que llenamos el Teatro de Verano. Los que arrastramos gente. No puedo concebir que a una persona que lleva solo 30 personas en el concurso se lo nombre como figura. Luis Alberto Carballo, Cucuzú y Miguel “Pendota” Meneses, más que nada por su trayectoria, son grandes personajes. Después hay excelentes componentes.
¿Usted ya llevaba gente en sus primeros años?
Me hice conocer enseguida. Yo era muy guapo. Me tuve que enfrentar a Mario Fosatti, a Pendota y a otros monstruos cuando estaban en su esplendor. Por mi forma de ser, logré insertarme siendo muy joven.
¿Y Zíngaros le daría lugar a las figuras jóvenes?
Por supuesto. Para el próximo año vamos a poner como figura central de la parodia Pinocho, al ex Nazarenos Claudio Melcom. Es un excelente valor, que tuvo buenas intervenciones en los carnavales pasados y en el que viene va a explotar, porque los Zíngaros tienen un plus gracias a nosotros mismos. Hubo un componente que venía saliendo desde hacía muchos años en carnaval, haciendo personajes principales, y nunca había ganado nada. Es más la gente lo miraba con rechazo. Cuando lo pusimos nosotros adelante ganó Figura de Parodistas y Máxima de Carnaval. En los últimos dos años ganamos la Mejor Voz, que es un premio muy importante y difícil de alcanzar.
En 2008 fue Robert Díaz y en 2009 Luis “Canario” Pereira… Este último, ¿sigue para el año próximo?
Si, por suerte sigue. Es un ser maravilloso y un cantante magnífico.
¿Y Robert por qué no salió? Faltando semanas para arrancar el carnaval pasado estaba ensayando con ustedes.
Lo saqué yo del conjunto.
¿Por qué?
Porque nos faltó el respeto. Tanto a mi como a la gente y sus compañeros. Él escribió un mensaje de texto insultándome y en vez de mandárselo a su destino elegido, me lo mandó a mí sin querer. Todavía lo tengo guardado y están todos los componentes de testigos. Si la gente lo lee se muere. Un día comentó “si no canto solo la despedida, no la canto”. Pasaba faltando. Fueron muchas cosas.
En la página web de carnaval Tré.com, salió en la portada que el cantante fue expulsado de Zíngaros tras hechos violentos, ¿fue así?
Es verdad. Hasta plata le di a ese componente. Un día llegué al ensayo, discutimos y le pedí que se fuera, pero que antes me devolviera el dinero. Al otro día lo vi que estaba nomás “pancho” y diciéndole a sus compañeros que salía por ellos. Ahí lo saqué del club.
¿En forma violenta?
No porque me lo sacaron.
¿Lo hubiera golpeado?
Un par de boleos se merecía. No pego de guapo, sino de caliente, de impotencia. Aparte no le puedo pegar a nadie, tengo ya 46 años y cualquier pibe de 20 me destruye.
En una de las primeras respuestas usted dijo que la violencia no existía…
Son casos aislados.
¿Perdió algún amigo por Carnaval?
Si, a uno. Pero para explicar este tipo de cosas hay que ser claro. Yo trabajo desde las diez de la mañana hasta las siete y media de la tarde, me rompo el lomo como muchísima gente. Tengo un hijo para criar, así que no me queda otra, por supuesto. Si a vos, que también laburás y metés horas como loco, cuando vas a cobrar y de los diez pesos de sueldo fijo, te descuentan cinco por la culpa de “Pinocho”, le vas a ir a decir enseguida de lo ocurrido. Ahora si ese descuento se repite por dos meses, y hasta por siete años, ¿vos que haces? ¡Siete años me estuvieron descontando plata del sueldo por esa persona! Yo lo iba a buscar para reclamársela y lo encontraba en el Casino. Me llegó a decir hasta que no tenia plata ni para apostar. Entonces cuando fue componente mío no lo aguanté más, esa bronca comenzó a crecer con el pasar del tiempo, y un día me lo crucé en un restaurante de comidas rápidas y nos tomamos a golpes de puños.
Entonces no fue por carnaval, sino que por un tema personal.
Si, fue un tema de la vida y no quiero entrar en detalles ni dar su nombre porque no me gusta abusar. Pero me llegaron a descontar hasta $6.500 en un mes por su culpa. Y no puede decir nada, porque tengo todos los descuentos que me hicieron guardados en ANDA. Después los fui recuperando de a poquito. “Estos arreglos corales hacélos a cuenta por lo que me debes”.
Tiene un carácter muy fuerte. ¿Se sintió identificado con alguno de los personajes que interpretó en su carrera?
Con Roberto de las Carreras me identifico un poco.
¿Por qué?
Porque desde jovencito siempre me gustaron mucho las mujeres. Ahora ya estoy grande para esas cosas, pero en mis primeros carnavales fui muy seductor. Era más reconocido como un seductor que como un loco. Aunque la locura siempre me ayudó porque me hizo diferente.
¿Qué siente cuando la gente en el Teatro de Verano se para a aplaudirlo y ovacionarlo por alguno de sus personajes o alguna de las parodias?
Nunca jugué al fútbol, pero debe de ser como un gol en la hora de una final. Lo que me pasó con Páez Vilaró fue único en mi vida. No vi nunca una platea tanto rato de pie. Había gente que lloraba y eso me hacia emocionar cada vez más. Cuando don Carlos se paró a abrazarme en la primera ronda y quiso leer la carta de sobrevivientes de los Andes conmigo, no lo podía creer. Capaz que peco de pedante, pero no me como nada con nadie. El conjunto que hace temblar la platea es Zingaros. El otro carnaval con la parodia de la Fuga y este año con la que cité anteriormente. Le duela a quien le duela, el que hace parar a la gente, sin escuela y sin saber actuar, es “Pinocho” Sosa. Hay videos. (Risas)
Hay una anécdota con Páez Vilaró, ¿no? Casi les hace perder el concurso.
¡Si! Es que el hombre no entiende de reglamentos, no sabe nada de eso. Él se paró y fue a abrazarme en plena actuación porque lo sintió así. Quedó muy emocionante porque leí la carta abrazado a él y me decía al oído, “dejáme agradecer”, y yo no podía dejarlo hablar al micrófono. No podía hablar porque no estaba fichado en el concurso. Hasta que le expliqué y se sentó. Pero me temblaban las piernas por la emoción y porque por un momento pensé que perdíamos todo. (Risas)
¿Y alguna vez perdió el concurso por culpa suya?
Por mi culpa sí. Creo que perdí el concurso del 2005.
¿Por qué?
Porque había hecho tremendo escándalo en 2004. Había dicho que no esperaba los fallos en el local de ensayo porque me había enterado de algunas cosas.
Pero después los escucharon…
Si, por la gente. No los podía dejar tirados cuando nos habían apoyado tanto.
¿De qué cosas se enteró como para decidir no escucharlos?
Había un periodista que todos los años me traía datos y nunca erraba. Y ese año me dijo algo.
¿Qué dato le dio?
Que no ganábamos.
¿Y siempre embocaba?
Siempre, era increíble.
¿Y sigue sosteniendo que en carnaval nunca hubo “cosas sucias”?
¿Y por qué sucias?
¿Se tienen que saber los resultados antes de emitirse los fallos?
No, pero eso no es nada raro. Eso lo sabía el tipo por algún lado, siempre se escapan cosas, aunque lo más lógico es que no se supieran como en estos dos últimos años.
¿Los años anteriores siempre supo antes el fallo del jurado?
No, pero siempre están los bolazos.
Pero ese hombre, ¿no le llevaba la posta?
Claro, siempre llevaba la posta. En 2002 me dijo, “salís tercero”, y así fue. En 2003, “ganás Pinocho”, y yo estaba muy nervioso, pero ganamos. En 2001, me dijo que iba a ser la Figura Máxima de Carnaval, y también embocó. Por lo que ahí le empecé a creer todo. Y en 2004 fue y me comentó que marchábamos, entonces reuní a los componentes, se los dije y resolvimos no esperar los fallos. Después esa noche fuimos al tablado Albatros y le comenté a la gente lo que habíamos resuelto. ¡Tremendo alboroto se armó! Me terminaron obligando a escucharlos. La gente de la Intendencia me llamó para pedirme por favor que no haga eso, entonces me comprometí con ellos y con la hinchada para tranquilidad de todos. Pero ahí no termina la anécdota, porque al final después de escuchar seis horas de fallos, ganamos, pero el satélite tuvo unos problemas y justo la imagen de nuestro club de ensayo no salió al aire, al contrario de los que habían salido segundos y terceros. Al otro día me suspendieron por diez días y no pudimos festejas en los tablados.
Entonces, ¿cree que lo castigaron al año siguiente por haberse manifestado de esa manera?
¡Claro, ahí está el tema! Fue un año muy raro el 2005.Ganamos la primera ronda, ganamos la segunda y perdimos la tercera. La verdad, no lo entendí.
¿Y en 2006 logró entender cómo ganaron en la primera ronda y después quedaron afuera de la Liguilla?
También pasaron cosas rarísimas. Era un año que sinceramente estábamos muy mal. En la primera rueda salimos primeros y en la segunda terminamos quintos, cuando habíamos mejorado mucho. No podíamos ganar y capaz que quedamos bien afuera de la Liguilla, pero no de esa manera.
¿Y en el 2010 ganan los Zíngaros?
Y eso espero. Vamos a hacer lo imposible para lograrlo.
¿Llegará la posta?
(Risas) Eso espero. Pero ojala que la posta la lleve la gente, como en 2008 y 2009. Ellos pocas veces erran.
¿Ya tiene pensadas “las explosiones” para el espectáculo?
Si, en Zíngaros nunca pueden faltar. Tanto la presentación, como las dos parodias y la despedida ya tienen sus explosiones pensadas. Va a ser el año con más sorpresas.
¿Y cuál era la segunda parodia?
Forrest Gump.uy. Los detalles imagínenlos. Me la sacaste, que lo tiró. (Risas)