Pasaron 51 años del julio de 1971 en que la edición original de Musicasión 4 ½ salió a la luz por el sello uruguayo De la Planta.
El disco es una materialización de grabaciones de las Musicaciones, aquellos espectáculos colectivos que Eduardo Mateo concibió junto al artista Horacio Buscaglia entre 1966 y 1969.
El Kinto, la banda liderada por Mateo que también integraron Ruben Rada, Walter Cambón, Luis Sosa, Mario Chichito Cabral, Urbano Moraes, Antonio Lobito Lagarde y Alfredo Vita, era la anfitriona de la velada.
Carlos Píriz, fundador de De La Planta junto a Jorge Coyo Abuchalja, se ocupó de que las Musicaciones quedaran registradas en el tiempo, cuando lanzó Musicasión 4 ½ .
Este disco llegó a varias generaciones de artistas tanto de Uruguay como del extranjero. Una de las personas que creció con las canciones que El Kinto tocó en las Musicaciones fue Juana Molina.
Musicasión 4 ½ llegó a la casa de la artista argentina porque Eduardo Mateo se lo regaló a su padre, Horacio Molina, mientras grababa Mateo solo bien se lame en Buenos Aires, en los Estudios ION. Años después todo el archivo del álbum le llegó por un gran amigo, Mario Agustín González, con quien emprendió la nueva edición del álbum.
A medio siglo del lanzamiento de la edición original, el sonido de la mítica banda El Kinto llegó a las manos de David Byrne. La intermediaria fue Juana Molina, quien lleva un estrecho vínculo con el británico que halagó su disco Segundo y fue telonera en varios de sus shows, incluído el que realizó en Montevideo en 2018.
Molina compartió en su cuenta de Instagram una foto donde se la ve acompañada de Byrne en el camarín de Le Poisson Rouge, una sala de conciertos de Nueva York, luego de que el músico fuera parte de su público en el último concierto que la argentina dio en Estados Unidos semanas atrás.
"Siempre que voy viene y me da un calorcito en el alma", escribió Molina. "Como verán, él ya tiene su copia de musicasión 4 ½ 50 aniversario", agregó.
La artista argentina creó un sello para reeditar este disco uruguayo que fue un punto de partida para el candombe beat en el país. Una reedición “de lujo”, que rescata aquella grabación original, pero que también agrega temas inéditos de El Kinto y sigue girando por el mundo.
En Uruguay el disco puede adquirirse en Little Butterfly Records, en la calle Tristán Narvaja o la web.