El próximo 22 de abril, la banda brasileña Titãs volverá a Montevideo, para presentarse en el Teatro de Verano, con La Chancha y Fede Vaz y su Sexteto Candombero como artistas invitados.
Las localidades ya están a la venta en todos los locales de la Red UTS, Tienda Inglesa y Redpagos.
Fede Vaz, armonicista destacado del medio local, será el encargado de dar el puntapié inicial a la velada, y le pedimos que respondiera nuestra Metralleta sobre gustos, influencias e intereses, y este es el resultado:
¿Cómo descubriste la armónica, y por qué elegiste ese instrumento y no otro?
Cuando la descubrí tenía 18 años, estaba laburando en el negocio de una prima y la encontré ahí, estaba de adorno. Era una armónica diatónica, barata y en mal estado. Cuando la vi la probé y me la llevé, algo así como cuando sos chico y te robas un caramelo del almacén. Si no fuera por eso, quizás ni músico sería. En mi familia nadie tocaba instrumentos, solo sé de un abuelo, que no conocí, que tocaba tango en la guitarra.
¿Quién o quiénes son tus referentes en el instrumento?
Es una lista donde incluyo a muchos, pero me identifico en general con aquellos armonicistas que le encontraron nuevas vueltas al instrumento, tocando géneros poco usuales con el mismo o desafiando sus límites en cuanto a la técnica. Hugo Díaz (Argentina) con la armónica cromática tocaba tango y folklore de una manera única, era realmente un maestro. Howard Levy (Estados Unidos) es otro: llevó a la armónica diatónica o blusera a un nivel técnico y musical muy despegado; descubrió que esta armónica tiene tres registros cromáticos, logrando con una de ellas tocar en todos los tonos y sobre cualquier género. Y así muchos, que más allá de la técnica me inspiran por su obra, como Antonio Serrano, Toots Thielemans, Franco Luciani, Gabriel Grossi, Little Walter, Carlos del Junco, Walter Horton, Little Walter, Larry Adler, Mariano Massolo, entre otros.
¿Recordás cuál fue el primer disco que te compraste?
Fue en plena adolescencia, ahí en esa etapa donde estás para la música de moda. Tenía 12 o 13 años, trabajaba en un vivero en La Paloma (lugar donde crecí), y con mi primer sueldo me compré el disco de Elvis Crespo.
¿Y el último?
La última compra que hice fueron dos vinilos que conseguí en Tristán Narvaja. Los dos brasileros y de estilos musicales que me apasionan: Forró y Choro. Uno es Forró e frevo, del maestro Sivuca y el otro Melodía do céu, del gran Waldir Azevedo.
¿Recordás cuál fue el primer disco o canción que te conmovió?
Sí, mi abuela iba a descartar su tocadiscos y al final me lo regaló con una ensalada de vinilos. Había de todo, pero "No te vayas nunca compañera", de El Sabalero, definitivamente me atrapó.
¿Y la última?
"Te abracé en la noche", de Fernando Cabrera.
Nombrá cinco discos que hayan sido importantes a lo largo de tu vida y explicá por qué.
El primero que se me viene es Repertorio, de Jaime Roos, un disco que me lleva a mi casa en La Paloma, me lo sé de memoria. En casa no había muchos discos, seguramente haya sido de los primeros que compraron, entonces lo escuchábamos mucho, sonaba en cumpleaños, fiestas, etc.
Otro fue una recopilación de los mejores temas de Totem; este disco sí que me voló la cabeza, tenía unas canciones increíbles como "Heloísa", "Dedos", "Guantanamera" y "La cebolla", entre otros, canciones que me erizan como la primera vez.
No te vayas nunca compañera, de El Sabalero, donde escuché por primera vez una armónica.
Viveza, de Fernando Cabrera, es un disco que me acompañó en un viaje bastante largo que hice por Brasil. Así pude escucharlo en contextos muy distintos, fue un compañero de viaje.
Giros, de Fito Páez, es un disco que me acerca a mi hermana. Ella era fan, tenía posters, libros, varios discos, y yo lo agarré medio de costado pero me lo sé todo.
¿Qué libro estás leyendo?
Languidez, de Alfonsina Storni, y una biografía de Johann Sebastian Bach.
¿Cuál fue la última película que te conmovió?
Truman, con el fenómeno de Ricardo Darín.
¿Podés elegir cinco canciones de Titas que te resulten representativas?
"É preciso saber viver", "Enquanto houver sol", "Epitáfio", "Marvin" y "Comida".
¿Y cinco canciones de La Chancha?
"Pánico", "En un pueblo así", "Los otros", "La felicidad te necesita estúpido" y "Si no es muy tarde".
Si pudieras elegir tres bandas (aunque ya no existan) para compartir cartel, ¿Cuáles serían?
Eduardo Mateo, Totem y Muddy Waters.
¿Y con qué artista vivo te gustaría compartir escenario?
Con Fernando Cabrera.
¿Qué cosa no podés tolerar de otros artistas?
Todo aquel que se maneje con verticalidad y sin respeto.
¿Para qué sirven las canciones?
Para muchas cosas, creo que es un medio muy poderoso para trasmitir formas de sentir y pensar. Claro que pueden ser usadas con muchas intenciones, ya sea como entretenimiento o como medio para expresar emociones más viscerales, que ayudan a vivir de una forma más linda.