"Renovarse o morir", dice la leyenda, y Favio Posca de esto sabe. Ama hacer reír y para conseguirlo no teme en recurrir a la música, los textos, las pantallas... Y tiene un público que lo sigue fiel, grandes y chicos, porque, aún en lo cotidiano, todos necesitamos algo que nos lleve a la total desconexión.

"Este es un show de Rock. Con una impronta muy mía. Dos horitas de risa. Es una realización de un artista especial con un lenguaje novedoso y totalmente diferente dentro de lo teatral. Es único lo que hago, no lo hace nadie. Y es un camino paralelo el que sigo. Nunca me interesó romper estructuras, sino directamente hacer la mía. Creé desde lo que yo creía que me iba a dejar en un estado de libertad y placer total", explica Posca a Montevideo Portal.

¿En qué se inspira? "Lo que siempre pienso es en la risa de la gente y estar todo el tiempo en esa catarsis. A veces tengo que esperar a que la gente pare de reír para arrancar el show. Yo me voy adaptando al público, la respuesta viene a partir de lo que yo siempre hice", cuenta el humorista.

"Hay que renovarse todo el tiempo. Generar sorpresa desde la música y los textos. Ya tengo 10 espectáculos oficiales en mi carrera y en todos estos años todo el tiempo abro nuevas puertas", agrega.

Viene a Uruguay, además, luego de su luminoso paso por el Bailando 2016, experiencia que encontró enriquecedora: "Me dejó una sensación muy buena y un recuerdo hermoso. Pude demostrar a la gente algo que por ahí no sabían de mí, y es que soy un buen bailarín. He estudiado mucho danza en conjunción con teatro. Le di siempre mucha importancia a la expresión corporal y se notó sobre la pista que yo no era ningún improvisado. Es como una carta para poder seguir sorprendiendo al público".

"El humor no sé si salva al mundo pero lo rescata. Son momentos de oxígeno que la gente necesita para desconectarse, aunque después tenga que volver a la rutina. Poder reírse a carcajadas y gritar y aplaudir es muy exorcizador y curativo. Reírse es sanador", concluyó.

Favio Posca se presenta 1, 2 y 3 de diciembre, a las 21 h, en la Trastienda Club Montevideo.