Con Raúl Castro, de Falta y Resto

Falta y Resto, con sus 30 años a cuestas, acaba de editar "La leyenda", una película en formato de DVD triple que repasa vida y obra, letra y tablado, de un conjunto emblemático del carnaval uruguayo. En la previa de su presentación oficial, que tendrá lugar en Café Tribunales, hablamos con Raúl Castro, letrista de reconocida y probada "tinta brava", que responde al apodo de "Flaco" y al orgullo de una vida dedicada a un género que define como "el águila de su corazón".

¿Cómo se meten 30 años de murga en un DVD?

La idea fue recopilar los materiales a los que teníamos acceso. De la primera década no teníamos mucha cosa, las primeras imágenes empezaron por el 84, de unos franceses que nos filmaron. Eran épocas en que el acceso al video o al cine era bastante restringido y la murga era un elemento mucho más subterráneo de lo que es ahora. No hay mucha cosa de esa época pero sí muchos testimonios y lo grabado en el audio, que a veces está representado también en el espectáculo de los 30 años que hicimos en el Teatro de Verano. La pesquisa fue hecha por mucha gente, comandada por Soledad Castro, mi hija, que hizo un trabajo maravilloso. Es bastante extenso, es el primer DVD triple de un artista nacional, cada uno encarna una década y son como tres horas de trabajo. Es un orgullo muy grande que esté en la calle.

Y ahora que está en la calle, que lo podés tocar, repasar la lista de contenidos, ¿te sentís representado en lo que refleja este documento de lo que vivió el conjunto en estos 30 años?

Sí, totalmente representado y más que eso, me siento muy orgulloso, halagado. Agradecido a Dios de haber vivido todos estos momentos que he estado viviendo y los que estoy viviendo, por suerte, con una institución cultural como es Falta y Resto, donde han pasado más de 150 o 200 murgueros. Cada uno tiene la misma importancia y ha hecho realidad esa leyenda; leyenda que hoy abre tantas puertas, que se dice Falta y Resto y la gente ya sabe de qué se trata, y que hay tantos pibes, muchachos más jóvenes, o más veteranos, que han vestido la camiseta y han hecho su camino en el arte popular uruguayo. Sí me siento representado, siento que la película me mostró que puedo ser el administrador en algún momento histórico de la murga, puedo ser el letrista, uno de los cantores, pero que no me pertenece, que le pertenece a la gente, a la gente que declara y da tanto amor en la película.

Me decís que la gente "ya sabe de qué se trata" Falta y Resto. Si la tuvieras que definir en pocas palabras, ¿de qué se trata la Falta para vos?

Falta y Resto, desde lo técnico, es una comedia musical política, es una manera de tratar de convertir la realidad en alegría. Desde lo emocional, es un águila. El águila de mi corazón.

En ese concepto de "comedia musical política" hay una postura artística del grupo, una búsqueda por la expresión más allá de los estándares del género. ¿La edición de este DVD tiene que ver también con eso, con la búsqueda de productos que trasciendan el evento popular de la esquina, del tablado?

Siempre ha sido nuestra meta demostrar el orgullo que sentimos por el género que profesamos. Para mí, para nosotros, para los que hemos salido, los que salimos y los que la están esperando, la murga es una plataforma de imaginación muy democrática, muy hermosa, muy simpática, muy acogedora, muy popular. Entonces, como tal, siempre queremos mostrar diferentes facetas de ella.

Creemos que la manera de perpetuar un género como la murga es tratar de renovarlo. A veces lo hemos conseguido y hemos hecho nuestros humildes aportes al género, y otras veces nos hemos ido para otros lugares. Nos hemos equivocado y la gente sabiamente nos lo ha hecho ver, y otras veces hemos insistido. Por ejemplo, recuerdo un cuplé del año 95 que en aquel momento la gente nos quería matar y hoy es uno de los que tiene más éxito en Argentina. Son cosas que te ayudan a tenerte fe cuando estás largando un producto nuevo, decís: voy a arriesgar. Porque hay un crédito de la gente, que si no lo agarra de entrada le va a seguir buscando la vuelta y, si es bueno, lo va a aquilatar como tal. Le hemos errado también, como todo el mundo.

Igual tener tantos años de carnaval, de tablado, te da cierta cancha o complicidad con el público como para permitirte esos "errores" o esos experimentos...

Sí, por ejemplo, el año que salió Malena D' Alessio, una rapera maravillosa, sabíamos que desde la forma, en un género tan conservador -en el buen sentido conservador, como es el murguero, que es muy tradicionalista- iba a ser un problema. Muchos iban a leer más la forma que el contenido. Y la metimos igual, nos jugamos la parada. Recuerdo que un loco en Malvín, medio borracho, me dijo cuando bajamos: "Flaco, sos un fenómeno. Pusiste una vedette en la murga y la gente todavía te aplaude".

Otra vez le sacamos la batería de murga, salimos con batería africana, tocaba Rafael Ugo. Empezaba la murga con un solo de batería de cinco minutos. Había gente en los tablados que me decía: "sos un atrevido, ¡no podés hacerle eso a la gente!". Tenían razón... y no tenían razón, porque yo también estaba probando. Nadie sale para perder, pero salís a jugártela, sino sería aburridísimo. Si no, la gente no iría a ver la Falta con expectativa. Tengo la suerte de que hay mucha gente que dice "vamos a ver cómo está el bicho este año, con qué van a sorprender, de qué se va a hablar y sobre todo cómo, porque si ves las letras, más o menos decimos lo mismo desde hace treinta años, el tema es cómo decir lo mismo.

Me hiciste acordar a una cosa que le dijiste a Lalo Mir en una nota en Argentina. Le recalcaste que la murga "no podía ser oficialista", y tiene que ver con cómo los tiempos políticos han ido cambiando pero la mirada de la murga tuvo el mismo espíritu siempre...

Mirá, hace muchos años vi en Buenos Aires una obra de Enrique Pinti, "Salsa Criolla", con un monólogo de esos maravillosos de Pinti y la canción final decía "pasan los políticos, los deportistas, pa, pa, pa... quedan los artistas". Me dio una fuerza de espíritu tan grande cuando escuché esa canción, fue en los primeros años de la Falta y dije: "pah, ¡lo que está diciendo este tipo! Quiere decir que si mantengo una cierta equidistancia, puedo decir mis opiniones mientras viva. Y voy a quedar". Y tenía razón, porque claro que el artista tiene su opinión política, deposita su voto, tiene su fanatismo por su cuadro... pero cuando crea, cuando forma su producto, cuando talla su madera, si logra la suficiente abstracción para que todo el mundo lo disfrute, lo goce, se emocione, ahí va a llegar a la esencia del arte y ahí va a trascender, en lo popular al menos.

Hace un par de años, en una nota sobre el regreso de la Falta al Concurso, dijiste que a lo largo de estos años la murga había cambiado ideológicamente pero que seguían "con el mismo espíritu de decir ciertas cosas". ¿Cuáles son esas cosas? ¿Qué es lo que permanece con los años y que la Falta siente que tiene que decir?

Pienso que esencialmente es un mensaje de esperanza y alegría, de que el futuro va a ser mejor. Que no depende del azar, depende del laburo de cada uno de nosotros, del "trabajo de la semana", como dicen los jugadores de fútbol, y que ese trabajo tiene que ser siempre con una broma, con una alegría, con una buena onda. Que es importantísima la solidaridad, cada vez más importante, entre vecinos, entre amigos, entre familiares, entre clases también. Es la manera de encontrar otro camino. Capaz que ese es el cambio ideológico que ha procesado Falta y Resto, está un poco menos "enfrentativa" con respecto a la solución del problema de la injusticia. Me parece que no es una clase contra la otra, sino un cambio de cabeza, cultural, de todos. Y por eso tienen tanta importancia los artistas. Sobre todo lo que mantiene la murga es un discurso ético, en el sentido de lo que te decía hoy: que decimos siempre lo mismo, no hay grandes fisuras en el discurso, lo que hay sí son diferencias, y muy grandes, en la manera, que creo que es lo que la gente valora y atesora.

También en estos 30 años tuviste a tus hijos, ellos empezaron a incorporarse a este mundo, ahora trabajan codo a codo contigo. Toda tu vida, incluso la esfera más íntima, está atravesada por la murga. ¿Cómo vivís eso?

Lo vivo con mucha emoción, con mucho amor. Somos una banda de gitanos. Se inmiscuye mucho el arte en nuestra vida, la creación poética, musical. Por ejemplo, mi hija es la que hizo la película y desentrañó el misterio del alma de la Falta para plasmarla ahí; Felipe comanda en lo musical; Leandro va a ser el director escénico del futuro espectáculo de carnaval; Pedrito, que tiene ocho, es mascota, baila, canta, hace versos, versifica de una manera maravillosa; Cecilia, mi nieta mayor, es una niña que con la cara solamente te demuestra mil emociones. Es muy hermoso que la familia abrace el género que vos abrazaste de niño y lo continúe. Lo vivo con mucha felicidad.

En el espectáculo de Café Tribunales va a haber una parte interactiva que es "Sea usted murguista por una noche" ¿Qué tiene que tener una persona para ser murguista?

Amor, mucho amor. Estar lleno de amor que lo haga cantar y transformar la realidad en alegría, que es lo que hace el amor. Pienso que no es necesario ser demasiado afinado, ni ser un gran actor, si hubiera sido necesario eso, yo no hubiera hecho treinta y pico de años de murga. Creo que hay que tener mucho cariño por cantar en grupo, darte tu espacio pero también darle el espacio al compañero, por reírse, aguantarse las pálidas entre todos. Eso tiene que ser un murguista. Y tener muchas ganas de decir, porque se tienen muchas cosas adentro. En la murga se pueden decir cosas muy duras pero sobre todo se pueden conseguir cosas muy lindas. Le aconsejo a la gente, de todas las edades, de los niños a los más veteranos: hagan murga, es una terapia para el corazón y para el alma.

La última pregunta, que quizá es un poco ambiciosa: ¿hay algunos versos, en todos estos años, que sean tus favoritos, versos de los que te sentís más orgulloso, no porque sean los más logrados necesariamente, sino porque están pegados a tu corazón?

(Piensa) Es ambiciosa, sí, porque a todos sus hijos uno los ama mucho. Pero creo que: "Si alguna vez no vuelve Falta y Resto / habrá mil murgas formadas por la gente / porque lo que se canta pueblo adentro / es inmortal y vivirá por siempre". Es el último recitado del año '83. Me parece que resume lo que siento, lo que pienso. Me gustaría reencarnar algún día en una mosca de mostrador de boliche, dentro de 200 años, y que haya dos pibes cantando una canción mía sin que sepan de quién es.

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Falta y Resto estará el 13 y 20 de setiembre en Café Tribunales presentando la película "La Leyenda", primer DVD triple de un artista local editado por Montevideo Music Group. La segunda parte del show revivirá el clásico "Sea usted murguista por una noche", con la participación de la gente.