"Hay que saber aceptar que existen los días magros, porque son el contrapeso de los que traen milagros. Ahora yo disfruto el verme parado, es solo porque supe soportar estar arrodillado", dice un fragmento de "Nada fue en vano", tema que originalmente salió en El calor de pleno invierno (2012), séptimo álbum de estudio de No te va Gustar.
En pleno aislamiento, rodeados de una crisis sanitaria, social y económica sin precedentes, en la que el mundo entero se pregunta cómo encontrar ese equilibrio entre los buenos y malos momentos para seguir adelante, ellos empatizan con su público más que nunca porque en 25 años han aprendido a los golpes que aceptar los días magros ha sido la ayuda para disfrutar juntos de los miles de momentos buenos que la carrera y la vida les han regalado.
Este 24 de abril salió a la calle -con tapabocas- el nuevo material discográfico de NTVG, Otras canciones por Latinoamérica, un mimo para los seguidores más files del conjunto que invita a disfrutar de esa conexión en vivo, un abrazo a través de melodías que resuenan desde hace años.
"Cuando empezamos la gira en junio de 2019, a medida que fuimos presentando el espectáculo en los distintos teatros nos dimos cuenta de que había canciones que eran parte de los espectáculos y que nos parecían buenas las versiones y la conexión con el público. Tenía sentido registrar en un disco estas canciones que no habían tenido oportunidad de entrar en el disco Otras canciones", cuenta a Montevideo Portal Martín Gil, trompetista de NTVG.
Y es que, sin bien estaba previsto que el disco saliera por estas fechas, la cuarentena impulsó a redoblar esfuerzos para que estuviera en tiempo y forma.
"No tuvimos la oportunidad de grabar todos los conciertos, las canciones que quedaron fueron de las versiones que teníamos las que creímos que estaban más buenas, las que quedaron mejor logradas, que traducían mejor lo que se daba con el público presente. Intentamos que hubiera de distintos lugares", detalla Gil, quien contó que dentro de la selección de canciones hay un cover de "Té para tres" de Soda Stereo, grabado en el recital que dieron en el teatro Gran Rex de Buenos Aires el día en el que Gustavo Cerati hubiese cumplido 60 años.
El álbum recoge además grabaciones en el Auditorio Nacional del Sodre de Montevideo, el Teatro Metropolitan de Ciudad de México, el Gran Teatro del BCP de Asunción en Paraguay, el Teatro Nescafé de las Artes de Santiago de Chile o el Teatro Jorge Eliécer Gaitán en Colombia.
"Fue un desafío para nosotros a todo nivel, cambiar la orquestación, apostar a otra tímbrica, apostar a nuestra música de otra manera e intentar lograr versiones de canciones que veníamos tocando desde hace muchos años, acostumbrados a escucharlas de otra manera. Tampoco sabíamos cómo iba a ser la reacción del público, porque están acostumbrados a una conexión de mucha adrenalina. Al ser una orquesta electroacústica hizo que nos posicionáramos de manera diferente en el escenario y cambia la interacción entre los músicos. Pero tuvimos la suerte, no solo de que gustara, sino de que se fueron sumando presentaciones y ciudades y si retomamos el ciclo vamos a llegar a cerca de 100 conciertos", detalla el músico.
Un salto que bien valía la pena dar para conectar con los seguidores de otra forma. "Creo que es importante que tanto nosotros como el público nos desafiemos e intentemos evolucionar. También sorprendernos. La banda siempre buscó eso: cambiar el sonido disco a disco e ir aportando algo nuevo. Esta fue una apuesta más grande porque cambiaron varias cosas a la vez. Creo que acercó a otro público, permitió que gente más grande pudiera ir con gente más chica. Y siempre está la opción de escuchar los discos, para volver a tener eso que mostrábamos hasta hace algún tiempo", destaca Martín.
¿La perspectiva? Seguir mirando hacia adelante y volver a lo que los ha mantenido unidos por 25 años: subir al escenario. "Nos encanta presentarnos en vivo, disfrutamos muchísimo cuando subimos a tocar. Eso nos lleva a viajar y nos encanta tocar en lugares donde nunca estuvimos y en lugares donde ya nos conocen, en diferentes condiciones, pero sobre todo en vivo. Para eso hay que trabajar, tener material, tener contacto con el público, y siento que para eso tenemos energías renovadas. El balance de estos 25 años sirvió para que cada uno caiga en la cuenta del lugar en el que estamos y que proyectemos para adelante, algo que depende de nuestro propio empuje".