FYIADV
El cuidado de nuestra ropa no solo preserva su apariencia y estado, sino que también refleja nuestro estilo. Aquí te ofrecemos unos consejos para su lavado y limpieza, y así garantizar que tus prendas reciban el mejor tratamiento posible.
1. Interpretá las etiquetas: antes de proceder al lavado, es fundamental entender las instrucciones de las etiquetas. Estas no solo sugieren la temperatura adecuada del agua, sino también el método de lavado preferido (a máquina, a mano, en seco, etc.), lo cual es clave para evitar daños.
2. Clasificación efectiva: separar la ropa según el color y el tipo de tejido es más que una simple recomendación. Los colores oscuros, especialmente los nuevos, pueden despedir tinte y manchar otros tejidos. Por otro lado, mezclar tejidos pesados con delicados puede resultar en desgaste o daños debido a la fricción.
3. Selección de detergentes: no todos los detergentes son iguales. Elegí uno que se adapte al tipo de ropa que estás lavando. Los detergentes para ropa delicada son menos agresivos, mientras que los formulados para eliminar manchas son ideales para ropa de trabajo o deportiva. En PROlimpio contamos con un jabón líquido de excelente calidad que cuida, limpia y perfuma tu ropa cuidando las prendas y el lavarropas.
4. Temperatura del agua: utilizar la temperatura adecuada es crucial. El agua fría es ideal para conservar los colores y es más amigable con el medio ambiente, mientras que el agua caliente puede ser más efectiva para prendas extremadamente sucias o para eliminar bacterias. Normalmente con agua fría es suficiente y efectivo.
5. Quitar las manchas viejas: lamentablemente algunas veces no es posible remover manchas muy antiguas, pero podemos intentar algunas cosas.
Foto: Freepik
Siempre antes de cualquier aplicación directa en la zona afectada debemos probar a conciencia la resistencia del color y de la tela en una zona oculta de la prenda. Hay tejidos que se pueden ver afectados de forma irreversible.
Aplicá quitamanchas en la zona y frotá o cepillá. Dejá actuar 30 minutos o más y llevá la prenda al lavarropas.
Si es delicada, humectala con agua y aplicale jabón líquido para lavarropas a modo de prelavado. Distribuilo con el dedo hasta que el producto se integre en el tejido y dejalo trabajar durante algunas horas.
En casos extremos, si se trata de alguna mancha de tinta o de algún aceite o grasa y habiendo probado previamente la resistencia de colores y tejidos, aplicá un solvente como alcohol isopropílico, aguarrás o disan, siempre sabiendo que la prenda se puede ver afectada de forma irreversible. Tendremos que elegir entre no poder usarla más o probar como último recurso alguno de estos solventes.
Finalmente lavamos la prenda aplicando un buen detergente y un buen suavizante para ropa que perfume, suavice y renueve los tejidos.
Una columna del equipo de PROlimpio.
