El pasaje cinematográfico de Batman en el cine estuvo cargado de interpretaciones. Desde el Batman de Lewis Wilson hasta el de Ben Affleck; todos mostraron caras distintas del gran superhéroe de DC Comics.
El clima mundial a finales de la década del 30 no era el mejor: Estados Unidos sufría las consecuencias de la Gran Depresión mientras que Europa, por su parte, palpitaba el comienzo de una guerra que dejaría decenas de millones de muertos. En ese contexto fue que surgió Superman y, con él, el concepto de un superhéroe con poderes sobrehumanos que lucha contra el crimen. Un año después, DC Comics crea un personaje diametralmente opuesto llamado Batman: un superhéroe sin poderes que fusiona desde El Zorro hasta el expresionismo alemán en una sola creación.
En el 1943 fue la primera de sus apariciones en el cine, en forma de serial. Este formato se basaba en la reproducción de un episodio semanal antes de la película principal.
Con el fin de la guerra, la gente se saturó de tanta violencia, desvalorizando a los superhéroes. Estos personajes quedaron estrechamente vinculados a las atrocidades cometidas durante los enfrentamientos bélicos, obligando a las compañías de comics a readaptar sus personajes.
De un tiempo a esta parte las representaciones fueron varias: en 1966 Batman volvió a las pantallas encarnado por Adam West. En las décadas de los 70, 80 y 90, la oscuridad volvió a tomar relevancia en el personaje, con superproducciones como las de Burton en las que Batman es interpretado por Michael Keaton y Val Kilmer.
En este capítulo de Fotogramas, Guillermo Ferrer analiza las distintas interpretaciones del personaje a lo largo de la historia y qué caracterizó a cada uno de ellos.