Semanas después de que se decretara la emergencia sanitaria en Uruguay por la detección de los primeros casos de coronavirus, el fotógrafo Diego Battiste se embarcó en un proyecto que arriba este sábado a la Fotogalería del Parque Rodó. Autóctonos presenta fotografías de animales que habitan el suelo oriental y que emergen en una serie que propone un reencuentro con el lado más salvaje de la patria.
Un lagarto overo sacando la lengua, dos tamborcitos común camuflados en un árbol de Montevideo, un gato montés cruzando un río a nado y un picaflor verde en pleno vuelo son algunos de los ejemplares retratados por el fotógrafo canario, reconocido por su trabajo en prensa, en especial por la fotografía de El Observador que reveló quiénes fueron los protagonistas del remate de los aviones de Pluna.
Este sábado a la hora 12, Battiste inauguró la muestra, que es organizada por el Centro de Fotografía de Montevideo (CFM), en la Rambla Wilson y Pablo de María. La exposición se podrá visitar hasta el 19 de junio. “Se las recomiendo; es un lindo paseo para hacer en familia”, dijo el fotógrafo a Montevideo Portal.
“Este es uno de los hitos que nos marcamos desde un principio, cuando empezamos este lindo camino, que se vuelve una realidad. Fue a comienzos de la pandemia, allá por mayo de 2020, que comencé a sacar las primeras fotos, y han pasado dos años desde que le nació Autóctonos como proyecto. Se requiere mucho esfuerzo y dedicación para poder llevar adelante una iniciativa de estas características. Detrás de cada foto, hay mucha paciencia, espera, tiempo, búsqueda y pasión, para lograr la mejor imagen de ese instante mágico”, cuenta con particular entusiasmo, como extendiendo las alas.
Battiste sigue realizando el trabajo de campo, con los pies sobre el barro o cruzando cañadas. “Aún me queda camino por recorrer y objetivos que cumplir, entre otros, el libro orientado a escolares y la web (https://www.autoctonos.uy), que ya está funcionando, pero en construcción”, agrega el fotógrafo.
En una entrevista concedida en noviembre a la agencia de noticias EFE, Battiste ponderaba el afán educativo de su trabajo. “El proyecto va apuntado siempre a escolares, pero como el desconocimiento de la fauna es intergeneracional, la idea también es fomentar el intercambio del niño, que va a la escuela, aprende sobre un animal nuevo y lo comparte con la familia”, señaló entonces el fotógrafo, que cree que, en general, “la fauna uruguaya es tan diversa como poco conocida y valorada”.