Por The New York Times | Giulia Heyward
En junio, los obispos católicos del país presentaron una iniciativa conservadora para negarle la comunión al presidente Joe Biden, el segundo presidente católico del país, que asiste a misa con regularidad y ha pasado toda su vida inmerso en rituales y prácticas cristianas.
La Conferencia de Obispos Católicos de Estados Unidos votó para redactar una nueva directriz sobre el sacramento de la eucaristía, en un desafío a Biden por su apoyo al derecho al aborto, que contradice la doctrina de la Iglesia católica. La nueva declaración abordará el sacramento en términos generales. Pero, en última instancia, podría utilizarse como justificación teológica para negar la sagrada comunión a Biden y a otros políticos católicos que apoyen el derecho al aborto.
La votación fue una dramática demostración de fuerza de un movimiento conservador ascendente dentro del catolicismo. A continuación, un vistazo a algunas cuestiones básicas en el fondo de la disputa.
¿Qué es la eucaristía?
La eucaristía, también conocida como comunión o santa cena, forma parte de la misa católica. Es un sacramento, un ritual que la Iglesia católica cree que canaliza la gracia divina, inspirado en la Última Cena. Los participantes consumen pan y vino, que los católicos creen que se transforman en el cuerpo y la sangre de Jesucristo durante la misa.
¿Quién puede recibir la eucaristía en la Iglesia católica?
El sacramento es la base de la vida católica y no todo el mundo puede participar. Por ejemplo, una persona que asiste a la misa en una iglesia católica, pero que no es católica no podría recibir la sagrada comunión.
También hay otras restricciones, incluso para los católicos. Por ejemplo, un feligrés que haya cometido lo que la Iglesia católica denomina “pecado grave”, pero que no se haya confesado también quedaría excluido.
Se espera que la nueva directriz que será redactada por el comité de doctrina de los obispos discuta la teología detrás del sacramento y la disciplina de la Iglesia católica sobre cómo y quién debe recibir la eucaristía.
¿Cuál es la postura de la Iglesia católica en cuanto al aborto?
La Iglesia católica rechaza todas las formas de aborto.
El día que Biden asumió la presidencia, el arzobispo de Los Ángeles, José Gómez, presidente de la Conferencia de Obispos Católicos, subrayó este punto y criticó la postura del nuevo presidente.
“El aborto es un ataque directo a la vida que también hiere a la mujer y socava la familia”, dijo Gómez. “No es solo un asunto privado, sino que plantea cuestiones preocupantes y fundamentales de fraternidad, solidaridad e inclusión en la comunidad humana”.
¿Quién decide si Biden puede comulgar?
En realidad, la conferencia episcopal no tiene el poder de prohibir a Biden recibir la sagrada comunión. Ese poder está reservado a los obispos locales, que tienen autonomía en sus diócesis o al papa. El cardenal Wilton Gregory de Washington D. C. ya dijo que no le negará el sacramento al presidente. El obispo electo de Wilmington, Delaware, ciudad natal de Biden, William Koenig, no se ha pronunciado al respecto.
La decisión de los obispos católicos de hacer una declaración pública es, en parte, una señal de la desaprobación conservadora hacia Biden y otros políticos católicos que promueven creencias que no coinciden con las de la Iglesia católica.
¿Por qué la gente está tan involucrada en la controversia?
La eucaristía tiene un profundo significado para los católicos, sobre todo porque es fundamental para la vida espiritual.
Todos los sacramentos de la Iglesia católica, incluidos el bautismo y la unción de los enfermos, son importantes, pero la sagrada comunión es “la fuente y el culmen” de la vida cristiana, que nos conecta con Dios y con la Iglesia católica, explicó el reverendo Ryan Ruiz, decano de la Facultad de Teología y director de liturgia y sacramentos del Seminario de Mount St. Mary en Cincinnati.
El conflicto sobre Biden y el aborto pone de manifiesto las divisiones políticas y culturales dentro de la comunidad de la Iglesia católica. Aunque esta institución se opone al aborto, más de la mitad de los católicos de Estados Unidos apoyan el aborto legal y un porcentaje similar lo considera incorrecto desde el punto de vista moral.
¿Qué opina el papa de las acciones de los obispos estadounidenses?
Antes de la votación de los obispos estadounidenses, el Vaticano emitió una advertencia para que no se redactara una declaración en la que se recomendara negar la comunión a personajes públicos como Biden.
Y después de una audiencia privada con el papa Francisco el viernes, Biden dijo a los periodistas que el papa había dicho que era un “buen católico” y que debía seguir recibiendo la sagrada comunión.
En respuesta a los periodistas que le preguntaron si, durante su reunión de 75 minutos, el papa le había dicho si debía o no seguir recibiendo la Sagrada Comunión, Biden contestó: “Sí”.
Cuando se le pidió que confirmara las declaraciones de Biden, Matteo Bruni, el vocero del Vaticano, dijo que la Santa Sede se limitó a hacer comentarios en un comunicado de prensa sobre los temas tratados durante la reunión y añadió: “Es una conversación privada”.
¿El aborto es el único tema en el que la actual legislación estadounidense entra en conflicto con la doctrina católica?
No. La otra cuestión es la pena capital, que es legal en más de la mitad de los estados y a nivel federal. En 2018, el papa Francisco declaró que la pena de muerte está mal en cualquier caso. Durante su campaña de 2020, Biden dijo que trabajaría para eliminar la pena de muerte a nivel federal y alentaría a los estados a seguir su ejemplo.
Otro caso sería el del matrimonio entre personas del mismo sexo, que se legalizó en todo el país después de que la Corte Suprema anuló todas las prohibiciones estatales al matrimonio entre personas del mismo sexo en 2015.
¿Qué sigue?
Los obispos votaron para elaborar directrices en relación con la eucaristía. El Comité de Doctrina de los obispos propondrá ahora un lenguaje que puede modificarse y debatirse en la próxima reunión de la conferencia episcopal en noviembre, cuando podría haber una votación formal.