Los muebles y su disposición, los colores y la iluminación que elijas para tu hogar son fundamentales. Algunas personas a las que les apasiona la decoración de interiores se decantan por un estilo marcado, que puede ser minimalista, nórdico, vintage u otros.

Pero si no es tu caso, podés tener en cuenta algunas ideas para darle un toque a ciertos ambientes de tu casa sin grandes costos ni modificaciones. Por ejemplo, las cortinas en la sala de estar siempre aportan un aspecto hogareño y personalizado; regulan la luz, dan privacidad y cumplen una función estética. Pueden ser de colores neutros o más llamativos para levantar el espacio.

Están las cortinas roller y las de tela. Estas últimas pueden ser de estilo blackout o más ligeras, con materiales como algodón, poliéster, lino o algodón y poliéster combinados.

Algo que no falla es agregar unos buenos almohadones en el sofá o en la cama. Existe una gran variedad, y podés optar por cambiar los fundones para acompañar los cambios de estación y renovar energías. Por ejemplo, para la temporada otoño-invierno, en Arredo se destacan los colores ocres y grises, los flecos, las borlas, y los estampados con líneas y figuras geométricas.

Para las habitaciones, las flores y los colores pastel no faltan en los fundones infantiles, así como los clásicos personajes animados. También los tonos más fuertes, y hasta algunos que brillan en la oscuridad para darle un toque mágico.

Hay telas ideales para espacios de uso diario porque por su composición no absorben líquidos, se secan rápido y no se arrugan. Luego hay otras más resistentes, por ejemplo, para quienes tienen mascotas.

La inclusión de elementos de la naturaleza es una tendencia que nunca pasa de moda: las plantas aportan frescura y vitalidad a los espacios. Ponerlas en vistosos contenedores es una buena opción, por ejemplo, bordados, de fibras naturales, con tejido y manijas. Otra alternativa es agregar portamacetas colgantes de algodón o de pie con lino.

Los organizadores tienen múltiples usos. Se pueden colocar en baños para poner accesorios, papel o toallas dobladas. En la sala de estar sirven para poner las mantas, que dan calidez y confort, más en épocas de frío. En los dormitorios, para guardar juguetes o libros.

En esta misma línea van las bandejas que cumplen doble función: decorativa y funcional. Las hay redondas o rectangulares, en materiales como bambú o madera.

Los difusores, velas y aromatizantes pueden estar presentes en cualquier espacio. Los primeros vienen con palitos que liberan perfume de forma constante, logrando un clima relajado y agradable.

Los aromatizantes son en spray y con fragancias frutales o florales, ideales para colocar en la habitación al momento de dormir para que ayuden a conciliar el sueño. Las velas de soja también tienen una variedad de esencias.

También es importante buscar un balance y repartir los objetos por toda la casa, sin llegar a saturar un solo espacio. No te olvides de otros detalles que le otorgan identidad a tu hogar, como fotos con lindos marcos o adornos que tengan un significado especial para quienes lo habitan.