El virólogo Benoît Muylkens de la Universidad de Namur (Bélgica) ha descubierto una manera de "multiplicar infinitamente" las pruebas para detectar el COVID-19 que puede ayudar a agilizar ese trámite, informó este miércoles el diario francófono "Le Soir".
Para conseguirlo, Muylkens utiliza una técnica de extracción de ácido ribonucleico (ARN) derivada de la química básica y publicada por primera vez en 1987.
"Es un protocolo muy simple que requiere mucho tiempo y mano de obra; sin embargo, puede duplicarse hasta el infinito, en cualquier parte del mundo siempre que haya suficientes investigadores, especialistas y productos básicos", explicó el investigador a "Le Soir".
Así pues, para revelar la presencia del coronavirus en un organismo, los científicos solo necesitarían una campana extractora específica, una centrifugadora de cuatro grados y el reactivo tiocianato de guanidinio-fenol-cloroformo, fabricado en Bélgica y disponible en grandes cantidades.
"Con estos elementos podemos identificar el elemento clave del virus, podemos buscar el ARN viral, transformarlo en ADN y amplificarlo", explicó Muylkens al medio belga.
El pasado lunes, el virólogo ya obtuvo algunas muestras para probar la técnica gracias a la colaboración del Hospital Mont-Godinne (Namur), y el martes, la Agencia Federal de Medicamentos y Productos de Salud (FAMHP) belga validó oficialmente el uso de este protocolo para detectar la enfermedad en el país.
Ese mismo día, la Universidad de Namur realizó 200 pruebas, y se espera que al final de la semana ya puedan realizarse unos 480 test diarios.
Muylkens aseguró que compartirá su técnica y la pondrá "a disposición de los laboratorios de todo el mundo".
"El concepto es suficientemente simple, pero requiere coordinación entre laboratorios, fuerza de voluntad, solidaridad entre investigadores, manos y coraje para lograr el objetivo juntos", puntualizó el virólogo.
EFE