Una innovadora cirugía metabólica, conocida como transposición Ileal, ha mejorado la salud de pacientes con diabetes en México, donde esta enfermedad es una epidemia que ocasiona más de 115.000 decesos anuales, la segunda causa de muerte.
Al menos 50 personas en México han controlado la diabetes mellitus tipo 2 con esta operación, con la que regularon sus niveles de glucosa, dejaron los medicamentos y frenaron el deterioro de sus órganos por esta enfermedad.
Perla Franco Díaz, quien se sometió al procedimiento en la ciudad de Guadalajara en 2019, contó este miércoles a EFE que recibió el diagnóstico de diabetes tipo 2 a los 15 años de edad, y desde entonces dependía de medicamentos y de administrarse insulina.
Cuando la vista de la joven empresaria comenzó a deteriorarse, sus padres buscaron otras opciones para tratarla y supieron de esta cirugía.
“Cuando empezó la visión borrosa fue cuando más me asusté, pero desde que me operé obviamente fue un cambio repentino, no tener medicación después de haberla tenido durante tanto tiempo fue un alivio totalmente, ahora puedo seguir mi vida con tranquilidad”, dijo la mujer de 23 años.
Cerca de 422 millones de personas en el mundo y 62 millones en América padecen diabetes mellitus tipo 2, enfermedad que daña progresivamente órganos como el corazón, los vasos sanguíneos, ojos, riñones y nervios, según la Organización Panamericana de la Salud.
En México, según el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), este mal afecta a más de 12,8 millones y es la segunda causa de muerte.
Ricardo Antonio Pérez tiene 50 años y cuatro de haberse sometido a la transposición Ileal. Con diabetes y alérgico a la metformina, el tratamiento más común, su vista se deterioró y sus riñones estaban por dejar de funcionar, pero supo que era candidato a la cirugía.
“(En una cita) traía 520 de glucosa y mis riñones ya estaban muy mal, a mí me decían que me preparara porque yo ya iba para diálisis o trasplante, traía los riñones a un 27 % o 28 % de función”, dijo a EFE.
Para ser candidato debía subir de peso, pero el deterioro renal era tal que los doctores decidieron que no podían esperar.
Tras salir del quirófano, comenzó a ver bien y su glucosa estaba entre los 105 y 90 miligramos en sangre, dejó de inyectarse insulina y sus riñones están hoy casi al 60 % de funcionalidad.
La cirugía no cura la diabetes pero sí la controla, señaló a EFE el doctor José Antonio Castañeda, especialista en este procedimiento.
Esto ocurre porque durante el procedimiento se cambia la posición del ileon, parte del intestino delgado que libera las hormonas que ayudan a producir más insulina y se coloca cerca del duodeno, que absorbe grasas, carbohidratos, vitaminas y proteínas, detalló.
De esta manera los azúcares y grasas no se procesan de inmediato y se evitan elevaciones de la glucosa.
Las personas candidatas deben tener diabetes sin obesidad, no tener deterioro de órganos y exámenes de sangre óptimos.
La cirugía se realiza en México, la India y Brasil en hospitales privados y mediante laparoscopía no invasiva con un nivel de éxito del 95 %, aseguró Castañeda.
EFE