Una investigación financiada por el Instituto español de Salud Carlos III (ISCIII) y liderada desde el hospital General Doctor Balmis de Alicante (este de España) sobre una muestra de 249 pacientes de centros sanitarios de España, India, Italia y México concluye que el uso de los sueros intravenosos abundantes (los popularmente llamados goteros) en casos de pancreatitis aguda son perjudiciales.
El trabajo "Waterfall" se ha publicado en la prestigiosa revista internacional The New England Journal of Medicine (NEJM) y los resultados desmienten el dogma hasta ahora establecido en el manejo clínico de la pancreatitis en el sentido de desaconsejar los sueros al no prevenir complicaciones sino todo lo contrario, explicó a EFE el investigador principal, Enrique de Madaria, que lideró el trabajo a través del Instituto de Investigación Sanitaria y Biomédica de Alicante (Isabial) del Doctor Balmis.
"El dogma de que había que poner muchos goteros porque mejoraba el curso de la enfermedad y disminuía las complicaciones e iban mejor no es cierto porque, muy al contrario, se recarga el sistema circulatorio de los pacientes y no mejora la evolución sino que, incluso, van un poco a peor", manifestó.
Presidente de la Asociación Española de Gastroenterología (AEG), De Madaria señaló que este "ambicioso" ensayo clínico aleatorio con 18 centros sanitarios obliga a cambiar en todo el mundo el manejo de la pancreatitis aguda, la tercera enfermedad del aparato digestivo en cuanto a número de ingresos y que "forma parte del día a día de cualquier centro hospitalario".
La pancreatitis aguda es una inflamación del páncreas, una glándula situada en la parte superior del abdomen, y se caracteriza por la aparición de vómitos y un intenso dolor abdominal que en dos de cada tres casos son leves, pero en el resto pueden sufrir complicaciones que afectan al propio páncreas o a otros órganos, como el riñón o el pulmón.
Hasta hace poco los expertos recomendaban un uso muy abundante de sueros intravenosos, conocidos popularmente como "goteros", a los pacientes con pancreatitis durante las primeras horas de ingreso porque se pensaba que un aporte intensivo de líquido mejoraba el riego sanguíneo del páncreas y evitaba la aparición de complicaciones.
Sin embargo, se comprobó que, en contra de la creencia hasta ahora, en las primeras horas del ingreso los goteros aumentan el riesgo de complicaciones cardiopulmonares y además no previenen la aparición de otras posibles complicaciones.
Concretamente, los autores del trabajo determinaron que una fluidoterapia abundante se asocia a un mayor riesgo de sufrir complicaciones cardiopulmonares como lo demuestra que el 21 por ciento de los pacientes necesitara que se parara la sueroterapia por sensación de ahogo o signos de insuficiencia cardíaca por sobrecarga de líquido en el sistema cardiovascular.
En cambio, un tratamiento más moderado con estos fluidos se asoció a solo un 6 por ciento de casos de sobrecarga cardiovascular.
“Estamos muy orgullosos del compromiso de los 18 centros que han formado parte de Waterfall. Llevamos estudiando la sueroterapia en pancreatitis aguda desde hace más de 10 años y esta investigación supone, al fin, clarificar definitivamente el papel de la sueroterapia agresiva, que debe ser abandonada", indicó.
EFE