Un joven de 24 años murió la madrugada del jueves 30 de noviembre tras ser baleado y apuñalado, y haber esperado más de dos horas para ser operado; la Administración de Servicios de Salud del Estado (ASSE) inició una investigación administrativa para determinar si hubo o no omisión de asistencia, informó Búsqueda y confirmó Montevideo Portal.
Esa madrugada, el joven fue trasladado por un móvil policial al Hospital del Cerro, que fue inaugurado el pasado 6 de noviembre. Sin embargo, no lo pudieron operar porque los dos cirujanos presentes estaban realizándole una intervención a una mujer que había llegado antes y era una paciente “grave”, señaló el gerente general de ASSE, Eduardo Henderson, a Montevideo Portal.
La paciente había ingresado por una supuesta apendicitis, que terminó siendo una peritonitis por un cáncer de colon perforado. A la mujer le quitaron la mitad del órgano afectado.
El joven baleado y apuñalado también requería una intervención quirúrgica urgente: tenía tres balazos y había perdido una gran cantidad de sangre. Pero no lo operaron con urgencia, el cirujano del Cerro pidió que lo trasladaran para que tuviera la atención correspondiente, dice Búsqueda, pero en el Hospital Maciel argumentaron que no podía ser trasladado.
Finalmente, murió en el Hospital de Clínicas, a donde fue trasladado dos horas y media después de haber ingresado al centro de salud del Cerro, a pesar de que la cirujana de guardia tuvo sus reparos sobre el traslado.
A raíz de este hecho, ASSE inició una investigación administrativa para analizar lo ocurrido y definir si hubo falta de omisión o no. Además, el Hospital Maciel, el Sistema de Atención Médica de Emergencia (SAME) y el Hospital de Clínicas también comenzaron sus propias investigaciones.
Desde ASSE, explicó Henderson, “lanzaron desde la gerencia general una investigación que estudia bien el proceso”. Se le llama “asesoramiento procedural”. Para ello, seleccionaron a tres personas para que vean el proceso desde el punto de vista “médico, legal y ético”, para “verlo globalmente”. Dos de los integrantes son de ASSE y un tercero externo.
Henderson dijo que en los procedimientos de la noche en la que el joven murió “hubo alguna serie de medidas no compartibles”.
“Este paciente se traslada después de dos horas de haber llegado al Cerro y llega en condiciones a otro hospital, al Clínicas, donde lo operan. Si esto se hubiera hecho dos horas antes, con menos pérdida de sangre y todo lo demás, probablemente hubiera llegado en otras condiciones, pero eso es lo que va a determinar la investigación administrativa”, señaló.
En esta línea, el gerente general de ASSE argumentó que “el traslado no puede demorarse”. En este caso, el paciente podría haber llegado a otro hospital en 15 minutos, señaló, y agregó: “No puede haber cuestionamientos de que el hospital tiene que funcionar”.
Al ser consultado sobre la posibilidad de que otro cirujano de ASSE se trasladara al Cerro para operar al hombre, Henderson respondió: “Sí, se puede, y se podría haber autorizado”. De todos modos, explicó que cuando un médico está asignado a un hospital tiene “la responsabilidad” de estar en el lugar de forma presencial. Es decir, si el profesional se retira del centro médico al que fue asignado y algo que lo requiere en el hospital ocurre, “está en falta”.
“Es una situación que en teoría es factible, pero es difícil en la práctica”, consideró, y opinó que “se pudo haber considerado” la noche del 30 de noviembre.
En esta línea, Henderson, que también es cirujano, explicó cuáles podrían ser las posturas por las que un cirujano traslade o no a un paciente.
Una de estas es la que se aplica cuando un paciente está “en shock, muy mal desde el punto de vista en el que está perdiendo sangre, está con baja presión, con taquicardia”. En ese caso, dijo Henderson, “hay que tratar de resolverlo en el lugar”.
Sin embargo, otros profesionales pueden decir “que [el caso] fue valorado por un médico, por un anestesista, que se le puso una vía nerviosa central y una sonda orotraqueal, y se lo dejó en condiciones para que pusiera ser trasladado”.
La investigación que inició ASSE podría resolver que “se haya hecho todo bien”; que debe “modificar los protocolos”; que es “necesario hacer una investigación administrativa o sancionar a determinada persona que no fue correcto su accionar”.
Henderson hizo hincapié en el traslado y consideró que en este tipo de casos “lo fundamental es la coordinación”.