El Organismo Internacional Regional de Sanidad Agropecuaria (Oirsa) pide a los países centroamericanos fortalecer los programas de vigilancia epidemiológica ante los casos de la enfermedad de gusano barrenador, que por el momento afecta a Panamá y Costa Rica.

De acuerdo con un comunicado compartido este sábado a EFE, el Oirsa, con sede en El Salvador, solicita el aumento de vigilancia en "zonas de mayor riesgo de introducción de gusano barrenador del ganado".

Además, llama a fortalecer los controles de movilización de animales susceptibles y a transportar únicamente animales sanos e incrementar las inspecciones de animales antes de su embarque y al momento del desembarque.

El organismo también sugiere implementar campañas de educación sanitaria para productores y público en general, y que se notifique, de forma oportuna, ante un posible brote de gusano barrenador del ganado a la Organización Mundial de Sanidad Animal (OMSA), con el fin de alertar a los demás países y tomar las medidas sanitarias pertinentes.

Agrega que continuará dando seguimiento a los informes emitidos por el Ministerio de Desarrollo Agropecuario (MIDA) de Panamá, por el Servicio Nacional de Salud Animal (Senasa) y la OMSA, y notificará oportunamente a las autoridades sanitarias oficiales.

Las autoridades de Costa Rica confirmaron el pasado 18 de julio la detección del primer caso en más de dos décadas del gusano barrenador, el cual fue hallado en un perro en el cantón de Corredores, fronterizo con Panamá.

El gusano barrenador es una enfermedad causada por las larvas de una mosca que deposita sus huevecillos en cualquier herida abierta de un animal de sangre caliente, incluyendo a las personas. Horas después de que se han depositado, nacen los gusanos los cuales se alimentan del tejido vivo.

Por su parte, Panamá emitió la semana pasada un decreto de emergencia por el incremento de casos en ese país, razón por la que el Senasa reforzó las medidas de vigilancia epidemiológicas e instruyó al personal de campo para que se intensifiquen las acciones en los puestos fronterizos.

EFE