La Federación Médica del Interior (FEMI), en el marco de la negociación colectiva del grupo 15 de los Consejos de Salarios de la salud privada, se declaró en asamblea permanente por la situación laboral y salarial. Por su parte, la Federación Uruguaya de Salud (FUS) adhirió al paro nacional parcial que se llevará a cabo el próximo viernes 30 de octubre.

Las necesidades que la FEMI reclamó a las mutualistas y al Gobierno incluyen “mejoras en la calidad de asistencia a los usuarios” (tiempos de consulta por paciente) en policlínicas y emergencias, así como también “dotaciones mínimas de médicos en las puertas de emergencia y urgencia”, sostuvo el gremio en un comunicado.

Asimismo, reclaman “mejoras en las condiciones de trabajo” y “mantenimiento de la partida por capacitación”.

Además, la FEMI pidió “recuperación salarial, tomando en cuenta la participación y responsabilidad que tuvo el equipo de la salud en la pandemia vivida recientemente”.

Según la FEMI, estas son “necesidades básicas que, de no atenderse, pueden repercutir en el sistema de salud”.

Anteriormente, el gremio había manifestado diferencias con las condiciones de trabajo de los médicos en el interior de las de aquellos en Montevideo, y reclamó esfuerzos, en especial para la salud mental. En esta oportunidad, el gremio argumentó que la pandemia por la Covid-19 “implicó resignación de condiciones de trabajo y salariales para todos los equipos de salud”.