Los 27 estados brasileños han empezado a tomar medidas a nivel regional para impedir el avance de la gripe aviar en el país, donde se han reportado 65 casos en aves silvestres y dos en aves de consumo familiar, aunque por el momento no hay registros en la producción comercial.

Brasil es el mayor exportador de carne de pollo del mundo, con un 35% del mercado internacional, y el pasado 22 de mayo decretó el estado de emergencia zoosanitaria nacional ante la aparición de los primeros focos de la enfermedad en el ámbito silvestre.

Sin embargo, en el último mes se han notificado dos casos en producciones de subsistencia: uno en el estado de Espírito Santo (sureste) y otro más en el estado de Santa Catarina (sur), segundo mayor exportador de pollo de Brasil.

Ante este panorama, el ministro de Agricultura, Carlos Fávaro, se reunió el jueves pasado con gobernadores y representantes de los 27 estados brasileños para pedirles que “refuercen las acciones de contención e impidan el avance de la enfermedad”.

“Para que las medidas de enfrentamiento sean efectivas, es necesario que los estados adopten medidas semejantes (a las tomadas por el Gobierno federal), reforzando la alerta incluso en las localidades donde no hay registros”, indicó la cartera.

El objetivo primordial es evitar a toda costa un caso de gripe aviar en la producción comercial, lo que “afectaría a todo el país”.

Bahía también decreta emergencia

En este sentido, el estado de Bahía (noreste) decretó este sábado el estado de emergencia zoosanitaria en la región para impulsar acciones de carácter preventivo.

En Bahía, por cuyo territorio pasa una de las principales rutas migratorias de aves silvestres que atraviesan el continente, se reportó el primer caso de gripe aviar el pasado 17 de junio y desde entonces se han registrado tres más, todo ellos silvestres.

El gobernador de Bahía, Jerônimo Rodrigues, explicó en una nota que su decisión se enmarca dentro del “pacto colectivo”, alcanzado el jueves pasado entre el Gobierno federal y los 27 estados, para tomar “acciones preventivas de control de la enfermedad”.

Japón suspende parcialmente las compras

Aunque hasta la fecha no se han detectado casos en la cadena comercial, Brasil ya está sintiendo los primeros impactos en sus exportaciones, después de que Japón suspendiera temporalmente las compras procedentes de Espírito Santo y Santa Catarina.

Del total de 2,63 millones de toneladas de pollo exportadas por Brasil en el primer semestre del año, Japón fue el destino de 219.800 toneladas, un 8,5% más que en el mismo periodo de 2022, según datos oficiales.

La medida afectará especialmente a Santa Catarina, que es el segundo mayor exportador de pollo de Brasil.

La semana entrante, Fávaro estará de visita oficial en Asia, que ha venido incrementando este año las compras de pollo brasileño, y tiene previsto reunirse con autoridades niponas para “reafirmar las medidas de seguridad sanitaria en la producción” nacional.

“Estamos trabajando con celeridad y transparencia, adoptando prontamente todas las medidas de control para que los consumidores de los productos de nuestros pollos, que están en más de 150 países, continúen tranquilos y confiados”, indicó el ministro en una nota.

EFE