"Invertir con enfoque de género no es solo un imperativo ético sino un buen negocio, ya que conlleva beneficios económicos, algo que está comprobado, impulsa impactos positivos en igualdad de género, e incrementa las oportunidades de acceso a capital y financiamiento por parte de las mujeres", afirmó la directora regional de ONU Mujeres, María Noel Vaeza.
La directora fue una de las participantes en la conferencia "Financiamiento Innovador y Empoderamiento de las Mujeres" organizada por ONU Mujeres e IE University, y realizado en el marco del programa Ganar-ganar: la igualdad de género de las mujeres significa un buen negocio', del ente de la ONU y la Organización Internacional del Trabajo (OIT), con el apoyo financiero de la Unión Europea.
CIFRAS "POCO ALENTADORAS" EN LATINOMÉRICA Y EUROPA
En América Latina las inversiones en empresas de mujeres "son muy poco representativas, pues solo el 22 % se realizan en empresas con al menos una mujer fundadora; en caso del capital privado y de riesgo el 7 % de las inversiones en el mercado emergente se destinan a empresas dirigidas por mujeres, y solo el 25 % de los inversores asociados a entidades inversoras son mujeres", explicó Vaeza.
"Son porcentajes muy pequeños e incipientes" para la región, aunque en Europa "las cifras tampoco son muy alentadoras, a pesar de ser una región más avanzada y progresista en igualdad de género: las empresas emergentes fundadas por mujeres reciben solo el 11 % del millón total del capital invertido", añadió.
El director general Interino América del Servicio Externo de la Unión Europea, Javier Niño Pérez, evidenció que "aún queda muchísimo por hacer en la igualdad de género en Europa".
"El Instituto Europeo de Igualdad señaló en su informe que sí avanzamos pero a paso de tortuga: hoy en día en la Unión Europea solo el 7,5 % los presidentes de los consejos de administración son mujeres y el 7,7 % de los ejecutivos son mujeres. Las cifras hablan por sí solas".
MEDIDAS IMPLEMENTADAS EN AMÉRICA LATINA
"Solo el 10 % de las mujeres empresarias (a nivel global) tienen acceso a servicios financieros de crédito", dijo la vicepresidenta de Colombia, Marta Lucía Ramírez, y "ahora lo que necesitamos es darles un verdadero acceso a la financiación" para sus empresas.
El presidente de Bancolombia, Juan Carlos Mora, dijo que "desde el punto de vista financiero está demostrado con números que el riesgo de prestarle a las mujeres es menor".
La vicepresidenta Ramírez apuntó que el Gobierno de Colombia está enfocado en que "las empresas de mujeres ingresen de lleno en el mercado de las compras públicas", y que ya están "caracterizadas 480.000 mujeres en diferentes sectores de la agricultura (...) vamos a tener una gran cantidad dueñas de su finca gracias a esta financiación".
En Panamá, "acceder a créditos formales también es una de las grandes dificultades de las mujeres empresarios", señaló Aimée Sentmat de Grimaldo, presidenta de la Junta Directiva de Banistmo, el segundo banco más importante del país y perteneciente a Bancolombia.
La entidad tiene el proyecto "Impulsa Mujer" con dos principales componentes: uno de productos financieros y otro de programas de mentorías, porque en Panamá muchas mujeres empresarias fracasan en los primeros doce meses de vida del proyecto al ser emprendimientos de necesidad", señaló de Grimaldo.
Con información de EFE