La Sociedad Uruguaya de Cirugía Pediátrica (Sucipe) emitió un comunicado este jueves en el que manifestó su preocupación y alertó por casos de adolescentes que sufren torsión testicular.
En esta línea, el gremio médico informó que llevará adelante una campaña “de información y prevención para las personas y familias estén alertas ante cualquier síntoma, con el objetivo de evitar consultas tardías”.
Según el comunicado, “el dolor testicular intenso y repentino, la coloración rojiza o morada, o la posición anormal y elevación pueden ser síntomas de una torsión testicular que requiere urgente atención con consecuencias fatales si no se atiende en menos de 12 horas”.
En detalle, se explica que el trastorno ocurre cuando un testículo gira sobre sí mismo, lo que provoca la torsión del cordón espermático, el conducto que transporta sangre al testículo. Esto genera un corte del suministro sanguíneo y un dolor intenso en quien lo padece.
“La torsión testicular es una emergencia médica bastante habitual en nuestro país, que afecta principalmente a niños, adolescentes y, en menor medida, a hombres adultos”, consigna el gremio.
“Es vital reconocer estos síntomas y buscar atención médica de inmediato. La vitalidad del testículo afectado es determinante luego de 12 horas de iniciados los síntomas, las posibilidades de salvar el testículo son muy pocas o nulas, y hay que proceder a sacarlo”, explicó el presidente de Sucipe, Carlos Kierszenbaum.
En este orden, se destaca la importancia de iniciar el tratamiento en menos de seis horas desde el comienzo de los síntomas.
“Las posibilidades de salvar el testículo son del 100%. Entre seis y 12 horas, la probabilidad se reduce al 50%. Sin embargo, entre las 12 y 24 horas desde que comenzaron los síntomas, la posibilidad de salvar el testículo será de apenas un 20%”, se añade.
El tratamiento inmediato consiste en la realización de una ecografía doppler, una técnica no invasiva de ultrasonido para mostrar qué tan bien circula la sangre a través de sus vasos sanguíneos.
Mientras tanto, afirmó Kierszenbaum, “el riesgo de realizar una operación de emergencia aumenta más cuanto más tiempo ha pasado”.