El aerobismo puede mitigar la “niebla mental” causada por la quimioterapia

Las mujeres que luchan contra el cáncer de mama pueden aliviar parte de su "niebla mental" de la quimioterapia mediante el ejercicio aeróbico, sugiere un nuevo ensayo clínico en Canadá.

Las pacientes de cáncer de mama en quimioterapia que participaron en una clase regular de aeróbicos reportaron que se sentían más agudas y tenían una mejor calidad de vida, encontraron los investigadores, según informa HealthDay News.

"Nuestros hallazgos refuerzan el argumento de hacer que la evaluación, la recomendación y la derivación del ejercicio sean una parte rutinaria de la atención del cáncer", señaló la investigadora principal, Jennifer Brunet, profesora de cinética humana de la Universidad de Ottawa. "Esto puede ayudar a empoderar a las mujeres que viven con cáncer y después de él para que manejen activamente su salud física y mental durante y después del tratamiento".

Para el estudio, 57 pacientes de cáncer de mama en Ottawa y Vancouver fueron asignadas al azar para tomar 12 semanas o 24 semanas de ejercicio aeróbico junto con su quimioterapia.

Alrededor de la mitad de las mujeres comenzaron su régimen de aeróbicos al mismo tiempo que iniciaron la quimioterapia, y la otra mitad comenzó después de completar la quimioterapia.

No se encontraron diferencias significativas entre los dos grupos en las pruebas objetivas de la función cerebral.

Sin embargo, las mujeres que participaron en ejercicios aeróbicos durante la quimioterapia informaron que sentían que tenían una mente más clara y aguda, y que su calidad de vida general era mejor.

El nuevo estudio se publicó en una edición reciente de la revista Cancer.

Los resultados muestran que se deben poner a disposición más opciones de ejercicio para las mujeres que reciben quimioterapia para el cáncer de mama, dijo Brunet.

"Para abordar esto, abogamos por la colaboración entre varios sectores (académico, de la atención de la salud, de acondicionamiento físico y comunitario) para desarrollar programas de ejercicio diseñados específicamente para las mujeres con cáncer de mama", dijo Brunet en un comunicado de prensa de la revista. "Estos programas deben ser fáciles de adoptar e implementar ampliamente, ayudando a que los beneficios del ejercicio sean más accesibles para todas las mujeres que enfrentan los desafíos del tratamiento y la recuperación del cáncer".