La artrosis de rodilla afecta aproximadamente a 275 millones de personas en todo el mundo y en 2017 se estimó que representaba 8,3 millones de años con discapacidad. El acetaminofeno, los medicamentos antiinflamatorios no esteroideos y los opioides son los medicamentos más utilizados para tratar el dolor, pero tienen una eficacia limitada.
Investigadores de la Facultad de Medicina de la Universidad de Boston (BUSM), la Universidad de Toronto y la Universidad de Berna (Suiza) han realizado un ensayo clínico con 220 participantes que sufrían de artrosis dolorosa. La mitad probó el calzado biomecánico mientras que los del grupo de control usaban los zapatos normales.
Después de seis meses el grupo biomecánico tuvo una disminución mayor en su puntuación de dolor medido por la escala de dolor del Índice de Artrosis del Oeste de Ontario.
"Estos hallazgos proporcionan una fuerte evidencia que respalda la efectividad de un nuevo tratamiento para la artrosis de rodilla", asegura David Felson, profesor de Medicina en BUSM y coautor del estudio. Felson, reumatólogo del Boston Medical Center, cree que el tratamiento probablemente funciona reeducando y reacondicionando los músculos de las piernas. "Este tratamiento puede ayudar a muchas personas con este trastorno", afirma.
Según los investigadores, no solo parece reducir el dolor en los pacientes, sino que también puede ser efectivo para algunas personas con dolor de cadera o espalda. No obstante, advierten de que se necesita más investigación para evaluar la eficacia y seguridad a largo plazo.
Con información de Europa Press