"Cuando atiendo a una familia en que hay demencia, sigo la norma de 'seguros y cuerdos'", explica el Dr. Andrew Duxbury, geriatra en la División de Gerontología, Geriatría y Cuidado Paliativo de la Universidad de Alabama, en Birmingham, EEUU.

"Todo lo que hagamos debe lograr que el paciente esté seguro y que la familia esté cuerda. En términos de la seguridad, hay cuatro grandes factores: las comidas, el transporte, las facturas y las pastillas", explicó en un comunicado de prensa de la universidad, según publica HealthDay News.

Respecto a las comidas, los cuidadores deben considerar si la persona es capaz de preparar los alimentos, comer unas cantidades saludables y adecuadas de alimentos, y si son conscientes de que necesitan comer, dijo Duxbury. "Si cualquier eslabón de esa cadena se rompe, quizá la persona no coma", advirtió.

En cuanto a la seguridad en la cocina, el "mayor problema es que dejen cosas en el fuego o que se olviden de apagarlo; pero si cocinar es parte de la rutina de alguien, permita que cocine solo mientras vigila lo que hacen desde otra habitación", planteó.

"Véalo de la siguiente forma: ¿Dejaría que un niño de 12 años haga la cena? Quizá sí, pero sin duda estaría en la habitación de al lado atento por si pasa algo", dijo Duxbury.

Otras sugerencias incluyen planificar comidas que requieran una preparación mínima o que se puedan hacer en el microondas; sacar las tijeras y los cuchillos de las encimeras y los cajones; poner etiquetas en los gabinetes de la cocina; y disimular el interruptor del triturador de residuos para evitar que alguien lo encienda accidentalmente.

No es seguro que los pacientes con demencia en etapa avanzada preparen comida en la estufa o el horno, dijo Duxbury.

En cuanto a salir de casa, la pérdida de independencia que ocurre cuando hay que dejar de conducir puede ser difícil para los pacientes con demencia.

"Muchas veces, un hombre mayor simplemente quiere tener las llaves del coche, sentirlas en el bolsillo y ver el coche en la entrada", dijo Duxbury. "Puede dejarle las llaves, pero no las llaves del coche. Dele las llaves de otro coche o quite la llave del coche del llavero. De esa forma, tendrá las llaves, las escuchará tintinear en el bolsillo y verá el coche, pero no podrá ir a ningún sitio".

Si una persona ya no puede conducir, los cuidadores deben asegurarse de que haya otra forma de transporte, sobre todo para las citas médicas. Haga arreglos para que les envíen los medicamentos, las compras o las comidas.

Evalúe y monitorice la situación financiera de la persona para asegurarse de que tenga suficiente dinero para pagar las facturas, y de que no se estén aprovechando de ella ni engañándola, aconsejó Duxbury.

Muchas personas mayores toman medicamentos múltiples. Los que sufren de demencia con frecuencia olvidan tomar sus pastillas, o toman pastillas juntas que pueden provocar efectos secundarios nocivos. Los cuidadores deben asegurarse de que sus seres queridos gestionen sus medicamentos de forma correcta y de que asistan a las citas con el médico. También es importante estar pendiente de los otros problemas de salud de la persona.

Para ayudar a su ser querido, prepare un pastillero con las pastillas de la semana, organizadas para cada día. Algunos pastilleros tienen temporizadores y cierres que pueden prepararse para evitar que tome la dosis del día equivocado.

Duxbury dijo que la mayoría de las personas con demencia creen que están bien.

"Las familias deben recordar que una persona con demencia no vive en la misma realidad que nosotros", añadió. "Viven en una realidad de la demencia de su cerebro. Esos individuos podrían tener unas percepciones completamente distintas del mundo que los rodea y su significado... Debemos aceptar esa realidad tal cual es".
En Uruguay, las familias de pacientes pueden asesorarse en la Asociación Uruguaya de Alzheimer y Similares (AUDAS).