Un equipo de cirujanos trasplantaron el riñón de un cerdo genéticamente modificado a un paciente vivo, un nuevo paso hacia una posible solución a la escasez crónica de donaciones de órganos.
El paciente, un hombre de 62 años, sufría insuficiencia renal crónica. “Se recupera bien” de la operación de cuatro horas llevada a cabo el sábado, informó el Hospital General de Massachusetts, en Boston, Estados Unidos.
“El procedimiento marca un hito importante en el intento de proporcionar órganos más fácilmente disponibles a los pacientes”, añade en un comunicado.
Ya se había trasplantado riñones de cerdo a personas en muerte cerebral y funcionaron.
En el pasado pacientes vivos también recibieron un trasplante de corazón de un cerdo genéticamente modificado, pero fallecieron.
Los médicos “me explicaron minuciosamente los pros y los contras del procedimiento”, afirmó el paciente, Richard Slayman, de la ciudad de Weymouth, en Massachusetts, citado en el comunicado.
“Lo vi como una manera no sólo de ayudarme a mí, sino también de dar esperanza a miles de personas que necesitan un trasplante para sobrevivir”, añadió.
Debería poder salir del hospital “pronto”, informa el comunicado. El paciente ya había recibido un trasplante de riñón humano, pero no le impidió tener que reanudar la diálisis desde mayo de 2023.
Más de 100.000 personas esperan un trasplante de órgano en Estados Unidos, sobre todo de riñón.
“Nuestra esperanza es que este método de trasplante ofrezca un salvavidas a millones de pacientes en todo el mundo que padecen insuficiencia renal”, afirmó el doctor Tatsuo Kawai, miembro del equipo que llevó a cabo la operación.
Esfuerzo de décadas
El campo de los xenoinjertos (trasplantes de órganos de animales a humanos) ha avanzado a gran velocidad en los últimos años. En septiembre de 2021, cirujanos del hospital Langone de Nueva York llevaron a cabo el primer trasplante mundial de riñón de cerdo a una persona en muerte cerebral.
El riñón ha sido proporcionado por la empresa eGenesis.
Esta operación “representa una nueva frontera en medicina y demuestra el potencial de la modificación del genoma para cambiar la vida de millones de pacientes en todo el mundo que padecen insuficiencia renal”, declaró Mike Curtis, director de eGenesis.
Los xenoinjertos plantean un desafío porque el sistema inmunológico del receptor tiende a atacar el órgano extraño.
Las modificaciones genéticas se llevan a cabo para reducir el riesgo de rechazo: eliminan algunos genes porcinos y añaden genes humanos mediante tecnología CRISPR.
Los científicos también llevaron a cabo una “inactivación de retrovirus” del cerdo para eliminar el riesgo de infección tras el trasplante, explica el comunicado.
“El éxito de este trasplante es el resultado de los esfuerzos de miles de científicos y médicos durante décadas”, afirmó Tatsuo Kawai, cirujano del Hospital General de Massachusetts.
Lucie Aubourg / AFP