Una mujer de 21 años falleció en un campamento de pérdida de peso situado en la provincia central china de Shaanxi, un suceso que ha causado indignación en las redes del país, que protestan contra los ideales de belleza imperantes, recogió hoy el diario local Global Times.
La joven, conocida como Cuihua, relataba en sus redes sociales su proceso de pérdida de peso, que comenzó el pasado setiembre, cuando pesaba unos 155 kilos.
En una aplicación de video, Cuihua explicaba su meta de “perder 100 kilos”, para lo que acudió a centros especializados en las provincias de Cantón, al sur, y en Shaanxi, en el centro del país, donde perdió 20 y 10 kilos, respectivamente.
El rotativo informa que, inicialmente, era Cuihua quien pagaba a estos locales para su tratamiento, pero, con el paso del tiempo, estas instituciones se ofrecían a pagar a la joven a cambio de la visibilidad que ofrecía ella en sus redes sociales.
Empleados del campamento encontraron a la mujer sin vida el pasado 27 de mayo, después de que ella hubiese asegurado en la red social Wechat que no se encontraba bien.
En los últimos días, el suceso ha atraído la atención de los internautas chinos, que critican las convenciones que ponen a la par delgadez con belleza.
“¿Son los métodos de pérdida de peso científicos? ¿Son perjudiciales para la salud? ¿Deberían los campamentos de adelgazamiento estar sujetos a una supervisión científica y a un sistema de alertas?”, planteaba el medio local Beijing News.
EFE