Brasileña cumplió 119 años y participará de un estudio genético

El pasado sábado, la pequeña localidad brasileña de Vespasiano, en la región metropolitana de Belo Horizonte, se vistió de fiesta. No era el aniversario de la ciudad, pero el festejo involucró a todos los vecinos: Otacília Senhorinha Lima, decana del lugar, a cumplía 119 años.

Según sus familiares, Otacília Lima nació en 1905 y ella dice que de “señorita” solo tiene el nombre, bromean. La jovialidad es el sello distintivo de esta tatarabuela amigable y risueña. La familia es grande. Entre los hijos, nietos, bisnietos, tataranietos y otros parientes suman más de cincuenta personas. “Muchas personas en la familia. No dio trabajo. Todos ayudan”, celebra la anciana.

Según informa el periódico O Alto Acre, doña Otacília se hizo conocida más allá de su comarca debido a su aparición en un proyecto de la periodista Luciana Morais, que rindió homenaje a más de setenta brasileñas mayores de 90 años. “El objetivo es rescatar historias de vida, valorar a las mujeres mayores, mostrar cómo viven y, con ello, conseguir que las personas mayores sean cada vez más respetadas”, explica la comunicadora.

Según Morais, las historias del proyecto serán objeto de un estudio de la Universidad de São Paulo (USP). “Los investigadores del genoma humano están investigando a los supercentenarios en Brasil. Vendrán a Minas para encontrarse con doña Otacília, de 119 años, doña Raimunda, de 112, que vive en Belo Horizonte, y Horádia, que cumplió 117 años en Ribeirão das Neves”, comenta.

La historia de vida de Otacília es mucho más extensa que la de Vespasiano, cuya denominación como localidad ocurrió hace 76 años. La anciana podría ser una de las personas más longevas de la actualidad en todo el mundo, ya que supera en tres años a la española María Branyas, incluida en el Libro Guinness como la más longeva en la actualidad.

El acceso al título depende de una solicitud y de una auditoría por parte de la mencionada publicación.