El directorio de la Administración de Servicios de Salud del Estado (ASSE) resolvió finalmente destituir al ginecólogo Alejandro Jabid, informó El País y confirmó Montevideo Portal.
El profesional que había sido denunciado por abusar de una paciente que fue a realizarse la prueba de Papanicolaou (PAP). Tras un fallo del Tribunal de Ética del Colegio Médico, el Ministerio de Salud Pública (MSP) había resuelto suspender e inhabilitar por seis meses del ejercicio de la profesión al ginecólogo.
Según informó El Observador, el sumario al médico se trató este miércoles en el directorio, por fuera de la orden del día, después de que dicho medio informara que el profesional había sido restituido y estaba realizando consultas por telemedicina. La resolución fue derivada a la Oficina Nacional del Servicio Civil, que deberá dar su aval para concretar la destitución.
En un comunicado, ASSE informó que “se recibió el informe de la Dirección de Investigaciones y Sumarios del sumario administrativo dispuesto por la gerencia general en octubre de 2022, al doctor Alejandro Jabid, quien se desempeñaba en el Hospital de Las Piedras”.
“El directorio de ASSE comparte lo informado por la Dirección de Investigaciones y Sumarios y la Dirección Notarial, que califica la falta administrativa como muy grave, pasible de destitución, resolviendo que previo a disponer de la misma, se eleve a la Comisión Nacional de Servicio Civil solicitando su pronunciamiento respecto a dicha destitución”, agrega el comunicado.
La denuncia
Según el fallo del Tribunal de Ética del Colegio Médico, el 10 de diciembre de 2020, la paciente fue a la clínica Premed para realizarse el estudio y conseguir una orden para una ecografía transvaginal.
Fue atendida por el profesional, quien se presentó porque era la primera vez que la veía y comenzó a interrogarla para completar la historia clínica, sin la presencia de otra persona en el consultorio.
La víctima señaló que al interrogarla sobre su edad y lugar de trabajo lo hizo de forma simpática, pero que en determinado momento el interrogatorio se volvió “más personal que profesional”, e insistió bastante en cuál era la fecha en que había tenido relaciones últimamente y la cantidad de flujo, sin mencionar si tenía ciclos irregulares, nódulos o HPV.
La víctima relató que, luego de esas preguntas, la invitó a pasar a la camilla para realizar el examen; sin embargo, en vez de introducir el espéculo, introdujo su dedo pulgar en reiteradas oportunidades, “acariciando los labios inferiores”.
“Ante un movimiento evasivo de mi parte, me explica que debe hacer eso porque estoy muy seca y no quiere lastimarme con el espéculo, y continuó haciéndolo más de 10 veces mientras mantenía una conversación cordial. Ante tal abuso, quedé paralizada, no podía creer lo que me estaba pasando, no pude reaccionar, él me pedía que me relajara y yo solo quería irme”, contó la mujer.
En otro fragmento de la crónica, la víctima señala que, alegando que “no veía suficiente”, tomó su celular y usó la linterna para alumbrar, desconociendo si utilizó guantes, si tomó una foto o grabó un video.
“Lo único que quería era que terminara para poder irme. Sin embargo, el doctor comenzó a elogiar mis piernas, mi estado físico para mi edad. Encontrándome en total estado de nervios, al querer bajarme de la camilla, se me traba mi taco derecho en el estribo, toma con una de sus manos mi pierna y con la otra mi tobillo derecho, le pido que me deje a mí sola y se retira al escritorio para realizar la orden del PAP y de ecografía transvaginal, momento en que se lleva su dedo pulgar a la nariz. No daba crédito de lo ocurrido, al llegar a la seguridad de mi casa estallé en llanto”, contó.
En el fallo, el Tribunal de Ética del Colegio Médico valoró que el doctor “excedió con mucho” los límites de un correcto relacionamiento médico-paciente, y constató que el ginecólogo había recibido varias denuncias o quejas en su contra.
El Colegio Médico resolvió poner una suspensión temporal por seis meses conforme a lo establecido en el artículo 28, literal D de la Ley Nº 18.591. El profesional apeló esta sentencia y el caso pasó al Tribunal de Alzada del Colegio Médico, que terminó fallando a favor de la conclusión arribada por el tribunal en primera instancia.
Luego de la sugerencia del Tribunal de Ética del Colegio Médico y el fallo del Tribunal de Alzada, la cartera de Salud Pública resolvió la suspensión e inhabilitación por el período que había estipulado el Colegio Médico. La suspensión del ejercicio había terminado el pasado 22 de febrero.
Previamente, el médico había sido desvinculado del Casmu y del Hospital Pereira Rossell, informó El Observador.