Ver una cucaracha en casa puede generar alarma, pero su presencia no siempre está relacionada con la suciedad, como suele creerse. Estos insectos son extremadamente adaptables, capaces de sobrevivir en entornos limpios mientras tengan acceso a comida, agua y refugio, según advierte el Centro Nacional de Información sobre Plaguicidas de EE.UU. (NPIC).

Las cucarachas están presentes en todo el mundo y, aunque no suelen causar daños estructurales, sí pueden representar un riesgo para la salud, sobre todo para personas con alergias o asma. Además, su capacidad de reproducirse rápidamente puede convertir una simple aparición en una infestación si no se toman medidas a tiempo.

¿Cómo entran a tu casa?

Estos insectos pueden infiltrarse a través de:

Grietas diminutas en paredes y ventanas

Bolsas, mochilas u otros objetos que se traen del exterior

Tuberías, cables o paredes, sobre todo en edificios con viviendas conectadas

Una vez dentro, suelen esconderse en zonas oscuras y cálidas como detrás del refrigerador, bajo la pileta o dentro de armarios y cajones.

Cómo prevenir su presencia

Prevenir la presencia de cucarachas es más sencillo que erradicarlas una vez instaladas. El NPIC recomienda:

Sellar alimentos y cubrir platos

Limpiar restos de comida y grasa, especialmente en la cocina

Reparar fugas de agua y sellar grietas o agujeros en paredes y ventanas

¿Qué hacer si ya hay cucarachas?

Ante signos de infestación, es clave actuar con rapidez. El enfoque más recomendado es el manejo integrado de plagas, que combina varias estrategias:

Identificar sus escondites usando trampas pegajosas

Eliminar el desorden, ya que objetos acumulados ofrecen refugio

Usar pesticidas con precaución, prefiriendo opciones menos tóxicas y siempre siguiendo las instrucciones

En base a Europa Press