Te cortaste con algo, no le diste mucha importancia, y ahora la herida tiene un mal aspecto, como por ejemplo : Roja, hinchada, capaz o con pus. Antes de googlear "¿me voy a morir?", respirá hondo y seguí estos pasos para curarla.

¿Cómo saber si está infectada?

Color y tamaño sospechoso: Si la zona está cada vez más roja o hinchada, mala señal.

Pus o líquido raro: Si empieza a largar algo amarillo, verde o con olor feo, Houston, tenemos un problema.

Calor y dolor creciente: Si sentís que te arde y te duele más de lo normal, es que tu cuerpo está peleando contra la infección.

Fiebre o malestar general: Si además de la herida te sentís horrible, puede ser señal de que la infección está avanzando.

¿Qué hacer para curarla?

Lavala bien: Usá agua y jabón neutro. No duele tanto como el alcohol y hace el trabajo igual.

Desinfectá como corresponde: Clorhexidina o agua oxigenada pueden ayudar. Evitá el alcohol puro porque quema y no es tan efectivo.

Dejá que respire, pero no demasiado: Cubrila con una gasa limpia, pero sin ahogar la herida.

Aplicá un antibiótico tópico: Una crema con antibiótico puede ayudar a controlar la infección.

No la toques todo el tiempo: Cuanto más la toques con las manos sucias, más le das motivos a las bacterias para quedarse.

Revisala todos los días: Si no mejora en un par de días o empeora, consultá con un médico.

¿Cuándo preocuparse?

Si la hinchazón y el dolor aumentan en vez de mejorar.

Si la fiebre se mantiene o sube.

Si la zona afectada se vuelve roja en un área más grande.

Si aparecen líneas rojas en la piel que salen de la herida (puede ser algo más serio).

Mantenga la calma, seguí estos pasos y no juegue al cirujano casero. Si observa  que la herida  no mejora, Consulte profesionales.