“Opinión impopular”, fue la advertencia liminar que la tuitera uruguaya @catajack colocó en inglés al comienzo de una de sus publicaciones.
“la Pampita gorda y empoderada de ahora me parece mucho más linda que la Pampita flaca y bronceada que nos venían vendiendo hace muchos veranos”, era la opinión en cuestión, que estaba destinada a la viralidad.
En el tuit, la autora adjuntó dos imágenes de la modelo y actriz argentina Ana Carolina Ardohain, conocida como Pampita. La tormenta estalló debido a que entre ambas fotos puede apreciarse una diferencia en el volumen anatómico de la artista.
Sin embargo, difícilmente alguna de ellas pueda encajar en la definición que la Real Academia Española de la Lengua ofrece para la palabra gordura: “Exceso de carne o grasa en el cuerpo”.
Así las cosas, puede ser objeto de debate si la Pampìta de la izquierda de la imagen está “empoderada”, pero resulta a todas luces evidente que no está gorda.
La “opinión impopular” se hizo popular a su manera, ya que se convirtió en tendencia en la red social. Mientras algunas internautas acusaban a la autora de transmitir un mensaje negativo para la autoestima de miles de mujeres, otros se dedicaron a disparar memes a gran velocidad