El actor estadounidense
Timothée Chalamet desató la locura entre cientos de personas a su paso por la
alfombra roja del Festival de Venecia, donde apareció con un entallado traje rojo
compuesto por pantalón y una parte superior con un foulard que solo cubría su
pecho pero dejaba la espalda totalmente descubierta, para presentar su última
película, Bones and all.
Chalamet se encuentra en la Mostra veneciana por
el estreno del largometraje con el que el italiano Luca Guadagnino, quien le
catapultó a la fama con Call me by your name (2017), aspira a conquistar
el León de Oro de esta 79ª edición del certamen.
El actor de 26 años, se mostró además reflexivo y crítico con las redes sociales. "Es difícil vivir en estos momentos", dijo en rueda de prensa y agregó: "Ser joven ahora y ser joven siempre, solo puedo hablar por mi generación, es ser juzgado intensamente. No puedo imaginar lo que es crecer con la avalancha de las redes sociales”.
En su opinión, "el colapso de la sociedad
está en el aire, o huele a eso". "Sin querer ser pretencioso, es por
eso por lo que las películas son importantes, porque ese es el papel del
artista, arrojar luz sobre lo que está pasando", opinó.
Acompañado por Guadagnino,
y sus compañeros de reparto -Mark Rylance, Taylor Russell y Chloë Sevigny-
Chalamet se mostró más intenso de lo habitual entre las jóvenes estrellas del
cine.
Al ser consultado
por el amor, reflexionó sobre la importancia de la familia y de los amigos, con
los que tiene "relaciones maravillosas", pero se ha considerado
"aún muy joven" para lograr entender el amor como lo hace los
protagonistas de Bones and All. "Tengo que graduarme en el amor de Lee (él) y Maren (Russell), para
encontrar algo grande", indicó.
En base a información de EFE.