Hace un par de años Cande Tinelli dijo: "La cara no me la tatuaría. De verdad, no me gustaría", y en 2016 ya se estaba retractando con su primer tatuaje facial. "Nunca digas nunca. Como siempre, es un placer tatuarme con vos. No solo por las tentadas y el humor que nunca falta, sino por el amor que le pones a lo que haces. Gracias genio, crack, ídolo y mi maestro del tattoo", escribió entonces la artista plástica cuando se tatuó una hoja junto a la oreja.

Pues bien, decidió subir la apuesta. Este viernes compartió una foto junto a su tatuador donde además de deshacerse en elogios, en la imagen se lo veía a Nazareno tatuando la frente de Cande.

Horas más tardes reveló el misterio. ¿Qué se tatuó? La palabra "frágil" en ruso.