El cofundador del grupo Pink Floyd Roger Waters acusó a sus detractores de “mala fe”, tras la oleada de críticas que recibió por su concierto en Berlín, en el que lució un atuendo “similar” al estilo nazi, lo que provocó la apertura de una investigación de la policía alemana.
El cantante británico, de 79 años, vistió un abrigo negro con un símbolo que recordaba la esvástica durante el concierto que ofreció el 17 de mayo en la sala Mercedes-Benz Arena de Berlín. Las imágenes provocaron duras críticas en Israel.
Durante el evento, también se podían ver inscripciones en letras rojas sobre una pantalla con los nombres de Ana Frank, la adolescente judía que murió en un campo de concentración, y Shireen Abu Akleh, la periodista palestino-estadounidense del canal Al Jazeera fallecida en una operación israelí en mayo de 2022.
“Mi reciente concierto en Berlín ha generado ataques de mala fe por parte de aquellos que quieren silenciarme porque no están de acuerdo con mis opiniones políticas”, escribió Waters el viernes en sus redes sociales.
“Los aspectos de mi concierto que han sido cuestionados son claramente un mensaje contra el fascismo, la injusticia y el sectarismo en todas sus formas”, y cualquier intento de verlo como otra cosa “es deshonesto”, añadió. Waters recordó que desde 1980, con la gira de The Wall, la “demagogia fascista” ha sido parte de sus shows.
El músico aseguró que ha pasado toda su vida hablando sobre el autoritarismo y la opresión.
En tanto, Waters dijo que cuando era niño, antes de la Primera Guerra Mundial, el nombre de Ana Frank resonaba en su casa: “Ella se convirtió en un recuerdo permanente de lo que pasa cuando el fascismo no se trata”.
“Mis padres pelearon contra los nazis en la Segunda Guerra Mundial”, escribió el británico, y recordó que su padre, que murió en 1944, “pagó el último precio”.
Waters es un conocido activista propalestino.
La policía de Berlín anunció el viernes que estaba investigando a Waters por “sospechas de incitación al odio, porque la ropa lucida en escena es susceptible de exaltar o justificar al régimen nacionalsocialista y alterar el orden público”.
La Cancillería israelí reprochó el miércoles a Waters “haber ensuciado la memoria de Ana Frank y de seis millones de judíos asesinados durante el Holocausto”.
Visita a Uruguay
El exlíder de Pink Floyd vuelve a Uruguay en el marco de su gira This is not a drill tour (Esto no es un simulacro, en español) y se presentará en el Estadio Centenario el 17 de noviembre de 2023. La última vez que Waters estuvo en el país fue en 2018, en el mismo escenario. Además, el músico pasará por Chile el 21 de noviembre y por Argentina, el 25 del mismo mes.
Adelantan que la gira es una “experiencia cinematográfica” y una “impresionante denuncia de la distopía corporativa”, con el fin de revivir la “acción para amar, proteger y compartir”. El espectáculo incluirá canciones de la época dorada de Pink Floyd y canciones más cercanas en el tiempo del artista. Así, el show viajará por discos como Us & them, Comfortably Numb, Wish you were here y Is this the life we want? Además, comunican que se trata de la gira de despedida de Waters.
Con información de AFP