Contenido creado por Gerardo Carrasco
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¡Cáscaras!

La pi..., sí, ¿y el huevo?: la inesperada charla de Canosa y Latorre sobre sexo oral

En medio de un streaming la mención a los huevos de gallina derivó en un inesperado debate sobre sexo.

12.11.2024 09:04

Lectura: 2'

2024-11-12T09:04:00-03:00
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La comunicadora argentina Yanina Latorre, conocida por su rol de panelista en el programa LAM (América TV), inició este año su propio programa de streaming en la plataforma Bondi. El espacio se llama No tiene  solución, y en su más reciente emisión contó con la presencia de Viviana Canosa en calidad de invitada.

Ambas mujeres dialogaron sobre temas diversos de la farándula argentina, como el romance de Wanda Nara y L-Gante y rumores sobre affaires de Marcelo Tinelli. Sin embargo, el momento viral sobrevino cuando Yanina habló sobre ingesta de huevos y aclaró que se trataba de los de gallina.

“El huevo del tipo no me lo como ni en pedo”, dijo la rubia, quien ante la mirada interrogante de su interlocutora, amplio el concepto: “no chupo huevos”.

“¿Vos chupás huevos?”, le preguntó a Canosa, quien reconoció que eso depende de la oferta. “Cuando tengo, sí”, dijo. Luego, el diálogo siguió por un derrotero inesperado para los espectadores, con Yanina asegurando que no tenia reparos en practicar una felación, pero que en esa conducta no incluía a las gónadas de su eventual compañero. En contrapartida, Canosa consideró que esa distinción resultaba fuera de lugar, ya que —en su opinión— falo y testículos conforman “un todo”.

Asimismo, Latorre quiso saber detalles de ese acto. “¿No te ahoga?”, inquirió, y fue instruida por su interlocutora, quien le aclaró cómo se practica. “No me los trago, vas jugando, para eso tenés la lengua”. explicó.

Entusiasmada, Latorre rompió entonces la cuarta pared y preguntó a un varón de su equipo de producción si a él le gustaba que le chuparan los testículos, pregunta a la que este respondió con un gesto que se podría interpretar como afirmativo.

Finalmente, Canosa consideró que a todos los hombres les agrada ese tipo de sexo oral y también —aunque no lo admitan— “que les metan un dedo”.



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