Jesica Cirio continúa bajo escrutinio a causa del escándalo con su ex, Martín Insaurralde. Mientras la Justicia argentina la investiga por presunto enriquecimiento ilícito, la modelo es ahora noticia debido a otro magistrado: la mismísima internet, que es un juez que todo lo recuerda y juzga, y que no conoce el indulto ni el sobreseimiento.
En las últimas horas comenzó a circular en la red el contenido de una entrevista que Cirio concedió a la revista Hombre a comienzos de 2009, cuando el dólar en Argentina costaba $ 3,40 y las redes sociales apenas despuntaban en el horizonte
En aquel reportaje que estaba relegado al olvido, la vedette reveló detalles sobre sus preferencias íntimas.
“Me gusta tomarme mi tiempo y que él se tome el suyo. Demando mucho cariño previo. Soy muy melosa, no me canso de recibir mimos”, explicó.
Sin embargo, lo que más llamó la atención ahora a los internautas fue su fetiche sexual, pese a que no se trata de ninguna práctica demasiado exótica.
“Me gusta seguir la acción a través de los espejos. Me gusta cómo se ve. Las películas porno no me agradan, me gusta cómo nos vemos nosotros con las luces apagadas, las velas encendidas y U2 sonando de fondo”, dijo entonces.