En la 95ª edición de los Premios Óscar hubo —como sucede año a año— todo tipo de looks: algunos jugados, otros menos jugados, algunos exuberantes y otros más sencillos. Así como la entrega de galardones y las perlitas de la gala ocupan un rol preponderante, los atuendos de las estrellas también tienen lo suyo y nunca pasan desapercibidos.
El actor argentino Ricardo Darín, protagonista de Argentina, 1985, nominada a mejor película internacional, que perdió contra All quiet on the western front, posó junto a su esposa, Florencia Bas, en la alfombra que, a diferencia de otros años, se tiñó de color champán.
Foto: Caroline Brehman / EFE/EPA
Su compañero de elenco Peter Lanzani lució, al igual que Darín, un esmoquin negro clásico de la marca Rochas.
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La ganadora del premio a mejor actriz por Everything Everywhere All at Once, Michelle Yeoh, eligió un vestido blanco con cola, de Dior.
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La actriz australiana Cate Blanchett, quien interpretó a Lydia Tár, una déspota directora de orquesta, lució un atuendo de satén turquesa y negro de Louis Vuitton.
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Rihanna y Lady Gaga, dos de las artistas que se presentaron en el escenario de los Óscar, ambas nominadas a mejor canción original por “Lift Me Up”, de Black Panther: Wakanda Forever, y “Hold My Hand”, de Top Gun: Maverick, respectivamente, lucieron dos looks en la noche: uno para posar en la alfombra y otro para su presentación.
La cantante de “Umbrella” mostró con orgullo su segundo embarazo llevando un vestido de transparencias, de Alaïa. En tanto, la ya ganadora de un Óscar por la canción “Shallow”, de A Star is Born —película que protagonizó junto a Bradley Cooper—, también se la jugó por las transparencias y eligió un total black de Versace.
Una de las más elegantes de la noche fue la actriz Emily Blunt, quien presentó el premio a mejor película de animación —ganado por Pinocchio, de Guillermo del Toro— junto con Dwayne Johnson, eligió un vestido de Valentino, blanco y entubado, con largas mangas que dejaban al descubierto sus hombros.
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Dos de los galanes del momento, Paul Mescal —nominado a mejor actor por Aftersun— y el chileno Pedro Pascal —protagonista de la serie The Last of Us—, rompieron corazones con unos looks sobrios y elegantes.
El actor de Game of Thrones lució un traje negro y una camisa blanca, de Ermenegildo Zegna. Mientras que el protagonista de Normal People, quien se presentó a la ceremonia acompañado de su madre, eligió un traje con saco blanco y pantalón negro de Gucci.
La actriz y modelo Cara Delevingne deslumbró con un diseño de Elie Saab, un vestido color rojo de un hombro, acompañado de un moño gigantesco en la manga y una amplia falda con volumen.
Otra de las nominadas a mejor actriz, Ana de Armas, quien interpretó a Marilyn Monroe en Blonde, lució una reversión de Louis Vuitton del vestido icónico que usó Marilyn cuando cantó “Happy birthday, Mr. President”.
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