El comunicador argentino Juan Ruffo conduce junto a Tomás Rebord el programa Hay algo ahí (HAA), uno de los contenidos más populares de la plataforma de streaming Blender.

Días atrás, Ruffo tuvo su momento de “fama uruguaya” cuando manifestó estar dispuesto a enfrentarse con el presidente Lacalle Pou en un ring de boxeo. “Es un boludo”, dijo sobre el mandatario uruguayo, y dio por descontada una victoria. “Lo recago a palos”, sostuvo.

Esa misma semana Ruffo viajó a nuestro país junto a la banda Las Tussi, y aprovechó el viaje para proseguir con la irónica baladronada. Durante su visita, se tomó una foto en la que se lo ve en actitud desafiante frente a la Torre Ejecutiva.

Ayer, el comunicador usó los micrófonos de Blender para narrar algunas impresiones de su reciente periplo montevideano, y se detuvo en un elemento en particular: los taxis montevideanos y sus conductores.

“Es impresionante la cantidad de falopa que toman los taxistas uruguayos. Cualquier taxi que tomes, a cualquier hora del día, es el mismísimo Franco Colapinto andando”, comentó.

 “están todos reduros, llegás en diez minutos a cualquier lado porque es cerca y porque están duros”, dijo, e invocó como testigos a sus compañeros de viaje y a “todos los uruguayos”, aunque consideró que estos últimos “quizá no se dan cuenta”.

“El país más tranquilo de Sudamérica tiene una subtrama muy hard, que son los taxistas”, añadió, y aseveró que la experiencia de viajar en taxi por la capital de nuestro país es “una mezcla entre Mad Max, Crazy Taxi y la fiesta de tres días de Ronaldinho”.

A modo de ejemplo, contó que en un viaje en ese medio de transporte, el taxista aceleró al punto de que “veías las luces de la ciudad pasar como si estuvieras en el Halcón Milenario”, en referencia a la nave de la saga cinematográfica Star Wars, capaz de alcanzar velocidades prodigiosas.

“En Uruguay es todo cerca porque tiene un mecanismo que dobla el tiempo y el espacio y legan más rápido”, refirió Ruffo, quien aseguró que ese milagro de la física tiene una sola explicación: “cocaína”.

En el mismo tono, contó ante cámaras que “los taxis en Uruguay tienen una mampara de cristal antibalas”, y consideró que quizá el cometido de esta barrera sea proteger al pasajero de un conductor que, bajo los efectos de las drogas, reaccione de forma paranoica. “Te pega dos tiros porque cree que lo quisiste robar, cuando en realidad solo tosiste”.

Para ilustrar la conversación, mostraron en pantalla registros de un caso reciente ocurrido en la avenida Luis Alberto de Herrera, donde un taxista fue filmado en el momento el que inhalaba droga.

A su turno, Rebord acotó que Uruguay es un país tan tranquilo que tiene que crear sus propios problemas para generar luego su "solución”.

Posteriormente, Ruffo contó su periplo por la noche montevideana, que incluyó una visita al clásico boliche Clash City Rockers, y su visita a las canchas para ver el partido Liverpool–Progreso.

Finalmente, regaló unos cuantos dulces Ricardito, y especuló acerca de que el níveo relleno de la golosina fuera “falopa en gel”.

Uruguay es una locura y Montevideo es la Miami... la pasé muy bien, los uruguayos son unos capos totales”, finalizó.