En su visita del jueves al Palacio Legislativo, el presidente Luis Alberto Lacalle anunció, entre otras iniciativas, una rebaja en el Impuesto a la Asistencia de la Seguridad Social (IASS), que grava las pasividades.
En concreto, el mandatario adelantó que se subirá la franja para el cobro del impuesto a las jubilaciones, de 8 BPC a 9 BPC (el valor de cada BPC es de $ 5.660). Esto implicará que el monto mínimo no imponible se ubicará en $ 50.940.
Además, en lo que refiere a este impuesto, también habrá un aumento del crédito por arrendamiento, que pasará a ser 8%.
El presidente estimó que esta rebaja impositiva tendrá un costo fiscal de US$ 30 millones, y que al subir el mínimo no imponible se verán beneficiados por la medida todos los contribuyentes del IASS, mientras que 20.000 dejarán de pagar el tributo.
Esta medida causó reacciones de disconformidad en filas opositoras, pero también en el seno de la coalición. Por ejemplo, el senador Guido Manini Ríos (Cabildo Abierto) pidió “establecer en la ley de seguridad social la previsión de su gradual desaparición [del IASS], atada al crecimiento del país”.
En las últimas horas, el diputado Gustavo Zubía (Partido Colorado) manifestó en redes su disconformidad con una rebaja impositiva que, en su opinión, no condice con lo que se esperaba.
“Molesto... muy molesto. Nos olvidamos de 160.000 jubilados a los que les prometimos y nada. Y los pocos beneficiados tendrán un promedio de descenso del IASS de 2500 pesos... Molesto, muy molesto. Así no cumplimos...”, escribió en su cuenta de Twitter.
Esta mañana, el legislador fue entrevistado en Informativo Sarandí y abundó en las razones de su disconformidad.
Durante a entrevista, expuso en números el monto que la rebaja significará en metálico para los jubilados que la reciban.
“Básicamente, el presidente dijo que aumenta en un BPC [Base de Prestaciones y Contribuciones, cuyo valor es 5.660 pesos] la franja que no paga, la no imponible, la primera”. Zubía expresó que “en números redondos”, esos jubilados cobraban unos 40.000 pesos y ahora llegarán a los 45.000.
“Esos 5.000 pesos [del BPC que se les aumenta] son los que no van a pagar IASS, un 10%, es decir 500 pesos. Unos 20.000 jubilados dejarán de pagar 500 pesos”, consideró.
Posteriormente, el diputado reconoció que “no había ningún compromiso” concreto sobre la rebaja anunciada el jueves, pero sí “una enorme expectativa”, ya que “en campaña electoral se prometió la derogación del IASS” y actualmente “no hay un esquema” que permita saber cuándo se llegará a eso.
“Hace 8 años, el presidente era senador por el Partido Nacional y le pedía a Astori [entonces ministro de Economía], creador del impuesto, su derogación total. Ocho años después, en tiempos de bonanza, con un aumento de cinco puntos en el PBI, el anuncio por el que estábamos expectantes se transforma en 500 pesos. Y ojo: 500 para los que están en el tope de la franja. El que cobra 41.000 pesos o algo así, tendrá una rebaja de unos 100 pesos”.
Durante el reportaje, Zubia recordó que había “consenso total” en la coalición de gobierno en considerar al IASS como “un impuesto abusivo”, y recordó que “Manini lo calificó de impuesto que carece de ética”, algo en lo que él concuerda “porque grava doblemente a los jubilados, porque considera la jubilación como renta, cuando no lo es”.
“Fuimos muy duros con el IASS, prometimos su derogación, lo criticamos como no ético. Después de todo ese ruido, que me hace acordar a Shakespeare con su ‘Mucho ruido y pocas nueces’, hoy estamos en 20.000 jubilados que tendrán una rebaja de 500 pesos, y otros de 100”.