Por Gonzalo Charquero y Joaquín Symonds.
El intendente de Durazno, Carmelo Vidalín, es uno de los caudillos que tiene el Partido Nacional en el interior del país. Ese mote no se lo ganó porque sí, sino por una trayectoria electoral con más éxitos que fracasos.
Fue electo edil departamental dos veces en 1985 y 1995, intendente de Durazno en 2000, senador en 2004, reelecto como jefe comunal en 2005 —cargo que asumió tras renunciar a la banca—, en 2010 y 2014 volvió al Parlamento, y tanto en 2015 como 2020 ocupó otra vez el sillón de la Intendencia de Durazno.
Con la impronta de quien no le gusta “mandar decir nada”, sino decirlo directamente, Vidalín brindó una entrevista a Montevideo Portal en la que habló de la interna blanca, la posible precandidatura de Laura Raffo y su preferencia por Álvaro Delgado de cara a las próximas internas. También contó qué hizo cuando se enteró de la denuncia por explotación sexual contra el senador Gustavo Penadés y expresó que desea que “no sea verdad”.
¿Cómo evalúa la gestión del gobierno hasta el momento con algunas crisis de por medio, como el caso Astesiano o el de Sebastián Marset?
El presidente Lacalle —y su equipo, pero cuando digo el presidente Lacalle es porque lo destaco—, acompañado de manera muy especial por el secretario de Presidencia, y algunos de los ministros de ese elenco —y destaco a [José Luis] Falero—, vienen realizando una muy buena gestión que se nota a lo largo y ancho del país. Como en todo gobierno, siempre hay algún poquito de aceite donde uno se resbala, pero hay que tratar de superarlo y salir adelante. Somos una joyita con respecto al resto de nuestra América.
En la última reunión con intendentes, Lacalle pidió que analicen la posibilidad de formar coaliciones en los gobiernos departamentales, según informó El Observador. ¿Está de acuerdo con esto? ¿En el caso de Durazno lo están trabajando?
Eso depende un poco de la idiosincrasia de cada departamento. Hay algunos colegas que sí verían con muy buenos ojos esta posibilidad de sumar, como por ejemplo en el departamento de Salto y en algunos otros departamentos más. Lo veo bien, pero lo que no debemos perder son nuestras identidades. Nos costó muchísimo esto cuando pretendimos hacerlo en Montevideo, y no va a ser fácil llevarlo adelante en otros departamentos. Hay que dejar de lado los intereses personales, que muchas veces en política esto cuesta, y pensar en grande. Es la única forma que nos permite la reforma constitucional de 1996 de que en algunos departamentos la coalición tenga posibilidad de ser gobierno.
Hoy en día el Partido Nacional es mayoría en varios departamentos de forma cómoda. ¿Ceder espacio en una coalición no sería también ceder espacios de poder en el gobierno departamental?
Yo admiro profundamente al presidente de la República por su paciencia, por su tolerancia, por la capacidad que tiene de saber escuchar a los demás compañeros de la coalición. Una virtud que no me caracteriza. Creo que si se establecen las reglas claras, no se pierde poder; pero las reglas tienen que estar claras desde el principio. Aunque lo hemos visto a nivel nacional, con estos cambios que se han dado, de un poquito para adelante, y un poquito para atrás... Pero si las reglas están claras, a nivel de los gobiernos departamentales, indudablemente esto es más fácil que a nivel de gobierno nacional.
¿Entonces estaría de acuerdo en conformar como líder político una coalición multicolor en Durazno?
Sí. Para mí es fácil decir que sí porque no soy candidato a intendente. Porque como es la segunda vez que repito, de las cuatro que llevo, por Constitución no puedo. Pero si mis compañeros de partido llegaran a estar en concordancia con alguna otra de las corrientes, ya sea del Partido Colorado, de Cabildo Abierto, o del Partido Independiente, indudablemente que los estaría apoyando.
La semana pasada el gobierno anunció que se extendían los jornales solidarios, que alcanzarán a 9 mil personas, y el Frente Amplio salió a remarcar que faltaban políticas sociales, porque esto era nada más que asistencia. ¿Qué evaluación hace? ¿Está de acuerdo con lo que dice la oposición?
Voy a aclarar dos términos, que son los de “oportunidad laboral” y “jornal solidario”. La oportunidad laboral, que es de lo que estamos hablando, es este proyecto que el gobierno con grandeza lleva adelante a través de las intendencias, y que tenemos que saber valorar. Y voy a discrepar con mis amigos del Frente Amplio. Yo no estoy de acuerdo con las limosnas, que no se valoran, y que muchas veces llevan a determinadas pérdidas de valores que estamos viviendo en nuestra sociedad. Estas oportunidades laborales, a través de un trabajo digno, permiten que la gente tenga la posibilidad de trabajar; y a la vez podemos llevar adelante procesos de enseñanza a través de Inefop, para que esto sea solamente el paso previo a un trabajo definitivo. Y el dinero no se obtiene de regalo. Se obtiene trabajando y dando algo de sí. Yo estoy contento con esto, agradezco al gobierno y al Parlamento que lo votaron. Pero además quiero contar que yo llevó adelante lo que sí se llama jornales solidarios, los cuales están cubiertos totalmente con recursos del gobierno departamental. El sistema es prácticamente el mismo y trabajamos muchísimo para que la gente entienda que esto es realmente transitorio. Tampoco vemos números que son altos a los ingresos, pero por lo menos te posiciona y te estimula para volver al sistema de trabajo.
A nivel país, ¿cree que el Mides está enseñando a pescar o que lleva una política asistencial de limosna?
El Mides lleva adelante unas cuantas políticas que son realmente trascendentes. Vemos en Martín Lema un ministro realmente comprometido y sería injusto de mi parte si señalara errores o equivocaciones. No obstante eso, debo decir que apuesto a las políticas en las que se enseñe a pescar y no en las que se da pescado.
Su departamento enfrenta un momento clave por el fin de la construcción de la segunda planta de UPM. ¿Cómo cree que impactará en Durazno?
Contrariamente a lo que el común denominador de la gente cree, para los duraznenses la construcción de la planta de UPM no generó muchos puestos de trabajo.
Por el tema de que los obreros provienen de otros departamentos...
La mayoría de ellos. Esta obra comienza en 2017 con una gran crisis en cuanto al desempleo. Por ende, todas las empresas que se instalaron ahí tenían que tomar a todos aquellos obreros que estaban en seguro de paro. Posteriormente sí tuvimos un poco más de movilidad en cuanto a ingreso de ciudadanos duraznenses, y quizás el mayor desarrollo se dio en Sarandí del Yi con la puesta a punto de lo que fue el funcionamiento del nuevo vivero, que tiene a 200 personas trabajando ahí. No obstante eso, tengo que valorar muchísimo lo que ha sido UPM para nuestra región en cuanto a crecimiento, desarrollo, consumo. Tengo que valorar también algunos otros elementos, como son los que se llevan adelante a través de la Fundación UPM, como la posibilidad de construcción de nuevas viviendas para familias duraznenses. Yo no veo solo la planta. En Durazno todo el este del departamento se ha visto favorecido con rutas nuevas, puentes, que acercan a los ciudadanos. En cuanto a la planta, ya está en funcionamiento y miles de personas trabajan ahí. Además de los funcionarios, están los transportistas. Son cientos de camiones los que transitan por nuestras rutas consumiendo. Pero, además, en el gobierno departamental hemos llevado adelante planes de formación de choferes para que los duraznenses tengan posibilidades dignas de trabajo. También lo que es la gastronomía va a ocupar a mucha gente y una serie de satélites que gracias a UPM se están dando. Todo eso, más algún aporte que tenemos encaminado, no nos va hacer sentir la finalización de esta obra.
Yendo a la interna del Partido Nacional, en las últimas semanas algunos dirigentes blancos salieron a criticar a Laura Raffo por su eventual precandidatura, porque se había apostado a ella para tener un rol en Montevideo y ella va por el camino nacional. ¿Qué le parece desde su rol de caudillo en el partido?
Me encanta que Raffo haya salido a jugar a la cancha grande. Que no se me enoje mi líder, Álvaro Delgado, por el cual sigo poniendo una ficha y jugado a él, como la mayoría de los intendentes, y eso le da un valor agregado a mi querido líder, pero creo que este es el tiempo de la mujer. Raffo va a ser realmente importante para el Partido Nacional. La veo una mujer con capacidad, una mujer con mucha base, que sabe manejarse de acuerdo al lugar en el que esté. Por lo tanto, seguramente con otra corriente —que creo que será una corriente que va a encabezar mi amigo Jorge Gandini—, el partido va a encabezar un abanico de tres candidatos para de esa forma tratar de obtener la mayor cantidad de opiniones para las elecciones internas.
Recién decía que la mayoría de los intendentes apoyan a Delgado, y esto es muy importante por la ascendencia que tiene el partido en el interior. ¿Esto es definitorio para la interna?
Aunque a algún compañero de Montevideo le pueda no caer bien, el Partido Nacional hoy es gobierno por los votos del interior. Hay 15 intendencias blancas y hay 15 intendentes comprometidos como nunca para lograr que el partido, juntos a los otros de la coalición, siga siendo una opción de gobierno.
Pero el hecho de que la mayoría de los intendentes apoyen a Delgado, ¿es algo que define la elección interna contra Raffo?
Laura Raffo es una persona que es la cara visible de la Lista 71. Y la 71 es la lista más votada a nivel de Montevideo, también con una fuerza muy grande a nivel de Canelones. Acá va a haber una separación entre el Herrerismo, Aire Fresco y la corriente de Gandini, donde nosotros vamos a estar fortificando mucho la opción de Álvaro Delgado como candidato, con razón fundamentada. Hoy por hoy, el hecho de haber estado al lado del presidente en un puesto de tanta responsabilidad le debe haber permitido crecer mucho, aprendiendo de las experiencias negativas, que son de las que verdaderamente se aprende, para poder aplicarlo en un nuevo gobierno y tratar de que los errores sean menores.
En ese esquema de corrientes, ¿dónde ve a Juan Sartori?
Tengo un afecto muy grande por Juan. En estos avatares de la política, a pesar de que en algún momento haya habido diferencias entre ellos, el tiempo hace que las asperezas se limen. Y lo veo con grandes posibilidades sumándose a la corriente de Jorge Gandini.
¿Cómo cree que repercutirá al Partido Nacional la denuncia en contra del senador Gustavo Penadés?
Lo primero que deseo es que esto no sea realidad; es lo primero que deseo. Y, segundo, creo que el Herrerismo va a salir fortalecido, por aquello del gran caudillo Luis Alberto de Herrera, que decía: “La quilla de nuestro barco hiende mejor en las aguas embravecidas”. En la medida que sean capaces de superar este evento —este duro evento que no tiene nada bueno, pero que tengo el sueño de que sea eso solamente—, el Herrerismo se va a ver fortalecido. Yo creo en la capacidad de mis amigos, los dirigentes de la Lista 71, como para poder evitar la dispersión de los adherentes a esta corriente, que es tan fuerte y significativa. Quizá debe salir a jugar un rol más importante el líder supremo que tiene el Partido Nacional, que es el doctor Luis Lacalle Herrera, del cual muchas veces nos olvidamos. A los uruguayos nos cuesta muchas veces ver a los profetas de nuestras tierras; vemos profetas en tierras ajenas y no valoramos la experiencia de alguien que fue un gran transformador de nuestro país. Creo que puede llegar a jugar un rol preponderante en estos tiempos.
Hablando de nuevo de Penadés, ¿usted le cree? ¿Lo respalda?
Yo les voy a contar que cuando mi amigo [el exvicepresidente por el Frente Amplio] Raúl Sendic estuvo caído, creo que debo haber sido de los primeros que lo llamó. Le dije: “Acá tenés un hombro”. Y a Gustavo igual... tengo confianza y espero que sea un mal momento.
A juzgar por su emoción, le cree.
Tengo por él una profunda admiración en su rol de legislador y a veces puedo estar perdiendo también la objetividad que se debe tener en estos casos.
¿Cree que el ministro Heber, el presidente y otros jerarcas como el titular del INAU, Pablo Abdala, hicieron bien en apoyar a Penadés?
Miren, generalmente, en el sistema político… cierren los ojos y piensen. No sé, no hace falta ir muy atrás. Cuando alguien está en dificultades pareciera que tiene lepra y todos se alejan. En todos los casos, porque yo también lo he vivido en carne propia [cuando le hicieron un juicio político por negligencia en la gestión de las inundaciones de 2009]. Entonces, no veo con malos ojos que haya algunos compañeros que lo rodeen para darle fuerza. Anhelo y aspiro que el senador Penadés diga la verdad en todo momento, esa verdad que todos nosotros queremos creer, y que salga limpio esta situación.
En caso de que la denuncia no tenga eco en la realidad, ¿cuál sería el motivo para que alguien hiciera una acusación de este tipo? Porque no hay solo un caso, se van sumando.
Sí. Me voy a agarrar de un libro bíblico que es Eclesiastés III, que dice: “Todas las cosas tienen su tiempo”. Voy a esperar al momento del fallo judicial para no adelantarme a ninguna respuesta de la cual después pueda arrepentirme.
¿Cuál será su futuro en política cuando deje de ser intendente de Durazno?
En los últimos tiempos he tenido algún problema de salud que me está afectando, que es lo primero que tengo que superar. Voy a estar aportando y sumando en lo que es la corriente de Aire Fresco y después veremos si aspiramos o no a algo nacional. Yo ya he sido diputado, senador e intendente tres veces. Vengo invicto en la medida que he encabezado listas. Tengo 67 años, voy a finalizar [este período] con 69 y por ende lo primero que tengo que hacer es salir de este difícil momento de salud, para poder ver para lo que estoy capacitado. Hay edades para todas las cosas y uno tiene que estar físicamente bien para poder cumplir con este compromiso de vocación de servicio que todos nosotros tenemos.
Recién hablaba de alguna zancadilla política que tuvo. ¿Se quedó con ganas de ser precandidato presidencial? Hubo en su momento una denuncia que hizo Presidencia, que después se archivó. ¿Qué reflexión hace de eso?
Bueno, fueron allá por el año 2009, por eso decía que uno tiene que tener memoria. En aquel momento, experimenté justamente lo que era esa enfermedad que mencionaba y debo decir que tuve dos personas que en todo momento me acompañaron a pesar de tener lepra, que fueron Francisco Gallinal y José Andrés Arocena. No obstante eso, fue todo muy llamativo... yo estaba con el entusiasmo de ser candidato a nivel nacional cuando el doctor Lacalle [Herrera] había dado un paso al costado. Salimos tres a competir: el señor [Luis Alberto] Heber, el señor [Juan Antonio] Chiruchi y yo, en un momento en que las encuestas me daban 51%. Segundo estaba Chiruchi con un 17%, y tercero Heber. En determinado momento el doctor Lacalle me llama para decirme que los mismos que le habían pedido que diera un paso al costado le habían pedido que volviera. Y bueno, yo no voy a ir contra un líder de esa características. Di un paso al costado; marqué, sí, mis votos con mi lista, que en aquel momento rondaron los 41.000. Después volví a ser diputado por Durazno.
¿Quedó con “la espina” de no haber podido ser candidato a la interna?
Me tenía muchísima fe en ese momento porque hay edades. Me hubiera tenido muchísima fe para poder competir con ese símbolo del Frente Amplio que es el señor José Mujica.
En su caso se da algo que es un tanto atípico, y es que cuando enfrentó situaciones complicadas, la gente le mantuvo el apoyo y lo hacía saber incluso a la salida de los juzgados, con pancartas de aliento. Ese capital político que tiene, ¿hubiera ayudado al partido?
Sí, sí, lo tengo claro. Sin lugar a dudas.
¿Cuál fue la respuesta cuando usted se lo planteó a Lacalle?
El doctor Lacalle tuvo la delicadeza de llamarme aparte y decirme, como dije anteriormente, que le pedían que volviera. Me veía —feo esto— un poco populista. No obstante eso, el doctor Lacalle me habló de armar dos listas al Senado, cosa que con posterioridad no se concretó y no sé el motivo, pero tampoco quedan dolores. Las cosas se dan como se tienen que dar.
Acá en Montevideo hubo una polémica con Carolina Cosse con la contratación de la artista Lali Espósito. Usted, como intendente, ¿cómo lo vio?
Yo creo que los intendentes no podemos ponernos en contra, porque el boomerang nos cae a nosotros. Cada uno de nosotros en nuestros departamentos llevamos adelante muchas fiestas; depende de cómo nos administremos económicamente, y ese es otro cantar. Aquí, en mi departamento, desarrollamos el Festival de Folklore. Este año, si Dios quiere, vamos a ir por el festival de rock. Es la forma que tenemos de darle a la gente la posibilidad del acceso a grandes artistas de forma igualitaria, porque hay gente muy humilde que, de otra manera, no podría llegar a eso. Además de trabajar por el bienestar de nuestra gente, también tenemos que darle alegría a la gente a través de estos eventos. El uruguayo, de por sí, es un hombre gris y ve el vaso medio vacío. Y yo creo que les hace bien a los uruguayos llevar adelante fiestas de estas características.
Acerca de los comentarios
Hemos reformulado nuestra manera de mostrar comentarios, agregando tecnología de forma de que cada lector pueda decidir qué comentarios se le mostrarán en base a la valoración que tengan estos por parte de la comunidad. AMPLIAREsto es para poder mejorar el intercambio entre los usuarios y que sea un lugar que respete las normas de convivencia.
A su vez, habilitamos la casilla [email protected], para que los lectores puedan reportar comentarios que consideren fuera de lugar y que rompan las normas de convivencia.
Si querés leerlo hacé clic aquí[+]