El Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) emitió este jueves en el mercado global un nuevo bono “Indexado a Indicadores de Cambio Climático” (BIICC) en dólares con vencimiento en 2034.
La cartera informó que la emisión alcanzó aproximadamente US$ 1.500 millones, de los cuales US$ 1.000 millones fue a cambio de efectivo, emitiéndose el remanente para recomprar bonos elegibles.
En esta línea, se afirmó que “la demanda superó ampliamente el monto emitido, con un libro de órdenes conjunto que, en su máximo, llegó a US$ 3.960 millones”.
“La emisión del BIICC se realizó a un rendimiento de 5,935% anual (y un cupón de 5,75% anual), correspondiente a un diferencial de 170 puntos básicos respecto al bono de referencia del Tesoro de Estados Unidos. El libro de órdenes consolidado estuvo compuesto por 188 inversionistas de Estados Unidos, Europa, Asia, Uruguay y otros países de Latinoamérica. Un total de aproximadamente 40 cuentas participaron por primera vez en una operación de Uruguay, muchas de ellas con un foco específico en emisiones de bonos sostenibles”, explicó el MEF en un comunicado.
Este es el primer título de deuda de estas características emitido por Uruguay y está atado al cumplimiento de indicadores ambientales como la reducción de gases de efecto invernadero y el mantenimiento de área de bosque nativo, según los plazos.
El MEF añadió en el comunicado: “A pesar del contexto actual de alta incertidumbre global, Uruguay logró conseguir financiamiento de gran escala, a plazos intermedios, a través de un instrumento innovador. El volumen de demanda permitió al gobierno comprimir el spread durante la transacción, con un valor final de 170 puntos básicos. Esto representó una concesión estimada por debajo de 20 pbs respecto a la curva soberana en el mercado secundario. La operación permitió acceder a demanda incremental de fondos de inversión comprometidos con el desarrollo económico sostenible. También contribuye a aumentar la visibilidad de la estrategia de acción climática de Uruguay, potenciando el acceso a otros instrumentos de financiamiento climático internacional para la transición a una economía más baja en carbono”.